El poeta Vicente Núñez fue enterrado ayer en Aguilar de la Frontera, su localidad natal, y donde falleció anteayer a los 76 años después de una larga enfermedad. El féretro con los restos mortales del poeta salió del ayuntamiento aguilarense, donde permanecía desde anteayer por la tarde cuando se instaló la capilla ardiente, y fue conducido a la iglesia de El Carmen donde se celebró el sepelio. Tras el funeral, el poeta del Grupo Cántico recibió sepultura en el cementerio de la localidad cordobesa.
Al sepelio han asistido, entre otros, la consejera de Cultura, Carmen Calvo, el vicepresidente segundo de la Diputación de Córdoba y delegado de Cultura en la institución, Alberto Gómez, y el delegado del Gobierno de la Junta de Andalucía en Córdoba, Antonio Márquez.
También acudieron los poetas y miembros también del Grupo Cántico Pablo García Baena y Ginés Liébana. El autor de «Ocaso en Poley», de 1983, poemario que le valió a Núñez el Premio Nacional de Poesía, fue candidato al Príncipe de Asturias y Medalla de Plata de Andalucía. En Aguilar, vivía en la calle que llevaba su nombre, y escribía en el Bar «El Tuta», donde todas las mañanas solía tomar unas copas de vino del lugar, en la dieciochesca Plaza Ochavada de la localidad.