Las obras de restauración del Pou des Vicents, ubicado en la vénda des Racó de Sant Jordi (Sant Josep), finalizaron la pasada semana, ascendiendo el coste del presupuesto final a 3.005 euros. La intervención, como las que se están realizando en una serie de pozos históricos de la isla, estaba incluida en el Plan Insular de Gestión del Patrimonio de 2001-2002, que viene desarrollando la Conselleria de Cultura.
Utilizando materiales originales, la restauración del Pou des Vicents no ha requerido ninguna intervención compleja, debido al buen estado de conservación. La obra ha consistido en reponer algunas piedras caídas, cambiar varias piezas de la polea y desenterrar una parte de la base del pozo cubierta con tierra.
Este pozo, situado en la carretera que enlaza el aeropuerto con la carretera de Eivissa a Sant Josep, es una perforación en la roca natural de planta subcircular, próxima a la forma oval, con un eje de 1.76 metros. Actualmente tiene aún agua y su profundidad estimada es de 10 a 12 metros. Justo delante conserva una taza de abrevar de piedra calcárea conglomerada encajada en la plataforma del mismo, resto de un mortarium para moler olivas de la época romana.