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Elektrozine 2002 amplía sus secciones y se especializa en el formato digital

El Festival Internacional de Cortometrajes de Eivissa se celebrará en varios escenarios entre los días 22 y 26 de octubre

Fernando Monge, creador y director del Festival Internacional de Cortometrajes de Eivissa Elektrozine.

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La cuarta edición de Elektrozine, el Festival Internacional de Cortometrajes de Eivissa, se celebrará del 22 al 26 de octubre en Can Ventosa y el auditorio de Cas Serres, en cuanto a la proyección del material a concurso, aunque también habrá otros escenarios para algunas de las secciones paralelas del evento, que dirige Fernando Monge. «Este año no proyectaremos nada en los Multicines Eivissa porque nos hemos pasado al formato únicamente digital; lo que venga en 35 mm también se proyectará en vídeo», apuntó ayer a Ultima Hora Ibiza y Formentera el fotógrafo y cineasta vasco residente en Eivissa.

Hasta el 15 de septiembre estará abierto el plazo de recepción de material a concurso para Elektrozine 2002. «De momento tenemos unos 80, pero tienen que llegar bastantes más. A ésos hay que añadir los 50 que nos ha enviado una distribuidora italiana que se llama '80 festivales alrededor del mundo'».«En cualquier caso, como hacemos todos los años, habrá unos 25 cortos a concurso de una media de ciento y pico». En cuanto al nivel de calidad y a las tendencias de la «cosecha» de este año, Monge afirmó que la primera «se mantiene bien, aunque todavía no hemos visto todo lo recibido»; y sobre la segunda, hay un poco de todo; incluso un corto sobre el 11-S, que todavía no hemos recibido».

Al margen del certamen en sí, lo más atractivo de Elektrozine para los cinéfilos de la isla son las secciones paralelas, que aunque aún no están todas cerradas, algunas prometen ser interesantes. «Habrá una de cine experimental que se llama Microcinema. Es una red internacional de cortometraje digital con sede en San Francisco y con puntos de exhibición en todo el mundo». Además, una sección que presenta Adictive TV, de Londres «sobre artistas visuales con sonido. Es un género híbrido entre el vídeo-clip, el vídeo-jockey y la instalación artística». «En principio está pensado pasarlo en el club Underground de Sant Rafel, que tiene varias salas. No son trabajos para ser vistos sentados, pues tienen asociada una música y son más propios para montarlos dentro de un contexto, un ambiente propicio», explicó Monge.

Al creador y responsable último de Elektrozine le parece muy bien que existan iniciativas como la de la Mostra de Curts de Sant Antoni, cuya quinta edición se celebra mañana en el Espai Cultural Sa Punta des Molí, y otras parecidas. «Me parece que son iniciativas positivas, sobre todo porque crean afición en la isla hacia un formato tan poco y mal difundido como este del cortometraje, un género que estimula la creación de los cinéfilos. Pero vamos, nuestro festival pretende una dimensión internacional y un planteamiento general que no tiene nada que ver con la muestra el que hacen ellos», concluyó Monge.

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