OTR/PRESS - LONDRES
El cine ha perdido a otro de sus grandes nombres. El actor irlandés
Richard Harris murió en la tarde del viernes en el University
College Hospital de Londres a los 72 años de edad, tras contraer
este mismo año la enfermedad de Hodgkin. La triste coincidencia es
que pocas horas más tarde se estrenó en la capital británica el que
será su último gran trabajo, la nueva entrega de Harry Potter.
Su muerte se produjo este viernes. Sus hijos Damian, Jarid y Jamie fueron quienes comunicaron la triste noticia. Harris, nacido el 1 de octubre de 1930 en Limerick (Irlanda) protagonizó más de 70 películas, entre las que destaca «Un hombre llamado caballo», la interpretación que le garantiza un hueco en la Historia del cine. «Camelot» o «Los cañones de Navarone» son otros de los grandes títulos que forman parte de su filmografía. Al tiempo que desarrollaba su carrera, Harris se aficionó a la bebida. Peter O'Toole y Richard Burton fueron ilustres compañeros de juerga del irlandés.
En los años 90, Clint Eastwood le recuperó para el cine con un papel secundario en «Sin Perdón», y Ridley Scott hizo lo propio poco después dándole el de Marco Aurelio en «Gladiator», un papel en el que estuvo espléndido. En este rodaje murió Oliver Reed, otro gran nombre del séptimo arte. Poco después llegaría «Harry Potter y la piedra filosofal». Harris aceptó el papel sólo porque su sobrina de 11 años, admiradora de las aventuras del joven mago, le amenazó con no volver a hablarle si no lo aceptaba. Ayer mismo no pudo acudir al estreno en Londres «Harry Potter y la Cámara de los Secretos», el que ya será su último gran trabajo en la gran pantalla, y que llegará a España el 29 de noviembre.