El Parlament balear aprobó ayer gracias a los votos del Pacte de Progrés, en la penúltima sesión plenaria de esta legislatura, la Ley de Museos de la Comunitat. El Partido dio su voto favorable a buena parte del articulado, después de que no fueran aceptadas las enmiendas parciales que defendieron.
La Ley de Museos define estos espacios culturales, las colecciones museográficas y los centros de interpretación y regula los criterios de actuación de las administraciones en este campo. Se trata la primera ley de estas características que se aprueba en la Comunitat balear, por cuanto la anterior legislación sobre museos se amparaba en la Ley de Patrimonio Histórico.
Este proyecto sienta las bases jurídicas fundamentales en el conocimiento, el estudio, la investigación y conservación; regula la actividad museística y ampara los derechos de los ciudadanos a acceder a las líneas de investigación de los museos. La nueva ley crea la Junta Interinsular de museos como órgano de coordinación política y comisión técnica insular en cada una de las islas, y además se constituye el registro general de museos y de colecciones museográficas.
A partir de ahora, para que un museo sea reconocido como tal deberá cumplir una serie de requisitos como disponer de un plan director del centro y de un inmueble adecuado, contar con un presupuesto, investigar, organizar exposiciones y actividades científicas, publicar monografías y conservar, inventariar catálogos, restaurar y ordenar los bienes culturales.
La Ley de Museos de les Illes Balears ha sido elaborada buscando el consenso de los tres consells insular, que son los que tienen en la actualidad competencia en la gestión de estos centros. El conseller de Cultura del Govern balear, Damià Pons, destacó ayer especialmente este aspecto de la nueva normativa: «La ley es el resultado de una gran cantidad de aportaciones que han ido introduciéndose durante el largo trayecto recorrido por el proyecto». Pons añadió que la Conselleria «tiene claro» que las leyes que se redacten en materia de Cultura han de ser consensuadas.
Para la redacción del proyecto han sido consultadas entidades civiles y políticas que tienen relación con la gestión de museos, como la Societat Arqueològica Lul·liana, el Institut d'Estudis Balearics, la Universitat de les Illes Balears o la Junta Interinsular del Patrimoni Històric.