«Hace cuatro años que empezamos con esto para divertirnos; primero fuimos dos y luego se han ido sumando gente, familia incluida». Con estas palabras, Adrián Cardona resumió ayer a este periódico la «filosofía» que anima a un grupo de entusiastas cinéfilos de la isla que, totalmente por libre, están consiguiendo sorprendentes resultados. El principal, que su cuarto largometraje, «Combate brutal» fuera seleccionado para la sección «Brigadoon» del pasado Festival Internacional de Cine Fantástico de Sitges.
A pesar de semejante proeza, para un producto en vídeo y con presupuesto mínimo, Cardona se mostró modesto. «Fue en la sección más cutre, pero estaba entre los 30 elegidos de unos 200 que se presentaron. Y según nos dijeron, el pase de la nuestra fue la que más llenó la sala; todo un subidón, porque es un festival de cierto prestigio», comentó este estudiante de Bellas Artes en Valencia, que aprovecha las vacaciones «para seguir rodando».
Un publicación del festival califica «Combate brutal» como «la mejor película de artes marciales del cine español». Nada menos. Y el actor que más éxito ha tenido es el padre de Adrián, el «Maestro que enseña al protagonista la técnica de los payeses»: «Estamos harto de payasadas; por eso hicimos payesadas», comentó Cardona a esta revista.
En estos momentos el «osado» grupo encabezado por el joven guionista, director y actor están enfrascados en el quinto largometraje, una especie de «western sobrenatural» titulado «Real Zombie Revolver». «La cosa va de freakies, pero con historia de amor de por medio; el bueno es muy bueno, el malo es muy malo, hay un sherif... todos los tópicos», comentó Cardona.
En cuanto a los escenarios, ellos solitos se han montado un decorado ad hoc por sa Caleta y se lo siguen pasando en grande. «Aquí no hemos presentado aún nada; ni las tres primeras («Escoria I, II y III); nos gustaría claro, pero necesitamos alguna ayuda. No conocemos a nadie, hasta ahora hemos ido en todo por libre», reconoció.