El músico y profesor ibicenco Adolfo Villalonga ha obtenido en propiedad por oposición la plaza que desde hace siete años venía ocupando en el Conservatori de Eivissa. «Es la de Fundamentos de Composición, que incluye Acompañamiento, Análisis y Armonía; lo que se conoce como las teóricas», explicó ayer a este periódico.
La oposición ha tenido lugar hace pocos días en el Conservatori Superior de Balears en Palma. Junto a Villalonga, aspiraban a la plaza tres opositores de Mallorca y uno de Menorca. Y aunque haya pasado todas las pruebas, aún le queda un último requisito para considerarse titular de la plaza: «He de hacer un año de práctica, a pesar de haber estado siete años como interino. Es una incongruencia, pero así están las cosas. Un año más de interinidad, pues; y luego tu tutor o el director del centro tiene que decir al final del año si eres apto o no apto para el cargo», explicó resignado.
Entre los asesores del Tribunal figuraba el prestigioso director de orquesta y compositor Salvador Brotons. «Como en mi asignatura no hay aún especialistas en Balears, tuvieron que recurrir a asesores para que el Tribunal tuviera un cierto conocimiento a la hora de valorarnos como se debe».
El esfuerzo, pues, ha merecido la pena. «Estoy contento y relajado, porque me permite hacer planes a más largo plazo y elegir los trabajos que te interesan hacer. Es otra perspectiva de vida, ni mejor ni peor», precisó Adolfo Villalonga. Sin embargo, no piensa «apalancarse» por el hecho de ser un funcionario con plaza fija. «Soy un culo inquieto y seguiré moviéndome todo lo que pueda. Lo importante en la vida no es tener algo sino hacer algo. Es lo que te da alegría de vivir», apuntó seguro.