J. HERRANZ
Hasta el próximo 12 de junio estará abierta al público la exposición La piel del alma, que Elisabeth Louy inaugura hoy (20,30 horas) en la galería Via 2 de Eivissa. Será la tercera exposición individual que presenta en la isla esta artista nacida en Nueva York, de padre persa y criada en Italia, que desde cinco año reside en Eivissa, que conoce desde los 90.
La mirada vuelve a ser el centro de gravedad de la obra de Louy, como ya sucediera en sus dos muestras anteriores: El Kismet y Negah; o en la instalación de retratos que presentó en Pronóstica. «Sí, la mirada me interesa mucho, es la puerta de entrada al alma», apuntó ayer la artista, quien para la ocasión ha seleccionados 25 obras, la mayoría de ellas en reconocimientos a amigos, lugares y personas que siente cerca de su corazón: desde sus hijas Leilah y Soraya a Ingrid Micus o Carlos Ereñu pasando por algunos carmencitos (figuras andróginas en danza) o amigos de la zona de ses Salines, donde reside la artista. En concreto, en un espacio de sa Revista llamado La Cueva, donde también tiene su estudio de trabajo.
La veintena larga de cuadros que la artista norteamericana presenta en su nueva exposición han sido realizados con técnica mixta: las caras dibujadas a lápiz (con el énfasis de atracción principal puesto en la mirada) y unas ligeras veladuras de textura fotográfica con algunos elementos sutiles y poéticos, como encajes de bolillos.
En uno de los cuadros que Elisabeth Louy cuelga en Via 2 figura este texto (también impreso en la invitación) de Simone Kuoni, una poeta suiza amiga suya: «En nuestro primer encuentro sólo vi tus facciones y la luz de tus ojos. Luego, el tiempo nos acercó y ahora que conozco la textura de tu corazón, tu rostro ya no es el de la primera vez. Porque ahora lleva impreso tu interior, la esencia de lo que eres, la piel de tu alma; por eso, en mi memoria, tu profundidad desdibuja la inmediatez de tus rasgos»