Respaldo ibicenco al arte italiano

La pasada semana los poetas ibicencos Julio Herranz y Ben Clark viajaron a Milán para participar con su poesía en la inauguración de la exposición de Mario Arlati Las noches azules, un proyecto que el pintor italiano, relacionado con Eivissa desde los años 70, realizó hace unos años con el poeta Antonio Colinas, que residió en la isla durante 20 años y a la que sigue volviendo cada verano. La muestra se presentó en el antiguo Oratorio della Passione de la Basílica de San Ambrosio, el templo más antiguo y prestigioso de la ciudad. La iniciativa creativa contó con el apoyo del Instituto Cervantes de Milán y de varias empresas de esta ciudad.
Además, Herranz y Clark también fueron invitados a la presentación del nuevo Premio di Poesia Santa Giustina, patrocinado por varios mecenas de la zona de Piacenza, al sur de Milán; y en otro encuentro literario y artístico en Bellagio, hermosa localidad del lago de Como, próxima a la frontera suiza.
Azul y lírico
Por problemas de agenda, Colinas no pudo asistir a este encuentro interdisciplinar en el que Eivissa tuvo una presencia también simbólica a través de los cuadros de Arlati y los poemas Las noches azules, de Colinas (leído por Clark y una joven local, Stefania), El blues de los azules, de Herranz; y Azul de metileno, de Clark, estos dos últimos leído por sus autores.
Por otra parte, durante los cinco días que los poetas ibicencos estuvieron en Milán, también participaron en un encuentro, celebrado en el atrio del Oratorio de San Ambrosio en el que participaron ocho poetas italianos de diversas generaciones y estilos. «Al ser el italiano y el castellano lenguas próximas, no resultó difícil la comprensión mutua, y fue interesante tratar a poetas de un país bien conocido en estas islas, pero por otras razones», apuntó ayer Herranz a este periódico.