El Ayuntamiento de Eivissa ha cerrado la Sala Capitular que permanecía abierta desde el año 2007 como espacio cultural.
El grupo municipal PSOE-Pacte del Ayuntamiento de Eivissa denunció ayer este «desmantelamiento continuo de espacios de atención a la ciudadanía que está llevando a cabo la alcaldesa Marienna Sánchez-Jáuregui y su equipo de gobierno en la ciudad de Eivissa». Los progresistas lamentan que «antes de cumplirse el primer año de mandato, el PP de Vila ha decidido reducir la oferta cultural del municipio, concretamente la del núcleo histórico, y ha cerrado como espacio expositivo la Sala Capitular, ubicada en el edificio histórico del Ayuntamiento de Eivissa».
La Sala Capitular fue habilitada como espacio por exposiciones después de que, en el año 2007, el Obispado de Eivissa retirara el permiso para utilizar la iglesia del Hospitalet como espacio cultural cedido al Ayuntamiento de Eivissa. El grupo municipal en la oposición recuerda que «desde entonces, y más aún con el cierre del MACE por reformas, la Sala Capitular se había convertido en un espacio alternativo muy apreciado por los visitantes del núcleo histórico y los aficionados al arte de nuestra isla».
Calidad
La programación y las exposiciones que se han hecho durante los últimos años, «todas ellas de gran calidad», habían sido planteadas por la dirección del Museo de Arte Contemporáneo.
A día de hoy, la Sala Capitular y su antesala alojan los retratos de los Hijos Ilustres de la ciudad, retratos «que en su día habían sido reubicados de manera muy digna a otros espacios del edificio histórico», recuerda el PSOE-Pacte, que critica que «además, se ha instalado en la sala un mobiliario mucho poco apropiado y de estilo moderno».
La oposición municipal criticó que «con esta nueva actuación, el PP demuestra el poco interés que tiene para mantener los servicios a la ciudadanía que se crearon durante las pasadas legislaturas», y así mencionó que los jóvenes del municipio «hace meses que no reciben ninguna atención (dado que se ha cerrado el CIJAE y se ha echado en todo el personal) y las mujeres han visto reducido al mínimo el espacio de reunión, consulta y atención que tenían en el Casal de Dones.