El pintor y escultor castellonense Ripollés se ha convertido, desde este fin de semana, en el primer artista de Occidente que presenta su obra plástica en el prestigioso Shandongshang Bowugan, el museo de la provincia de Shandong ubicado en la ciudad de Jinan (China), de unos seis millones de habitantes.
Según han informado desde la organización, se trata de la segunda exposición inaugurada por Ripollés en China.
En esta ocasión, presenta 86 obras de pintura, escultura y grabados de su época más contemporánea que se han distribuido entre los 85.000 metros cuadrados de un museo fundado en 1953 y que, desde su creación, sólo había mostrado la producción artística de creadores chinos.
Así, el artista castellonense ha roto con su muestra titulada ‘Universo Ripollés' esta tradición del imponente Shangdongshang Bowugan, que recibe una media de un millón de visitas al año.
Según las mismas fuentes, la exposición «ha causado una gran expectación en Jinan» al tratarse del primer artista extranjero invitado por el museo en sus cerca de 60 años de historia, tal y ccomo ha podido comprobar el propio artista en la ceremonia de inauguración, celebrada este fin de semana.
Ese acto reunió a representantes del gobierno provincial, como el consejero de Cultura de Shangdong, así como a representantes de asociaciones culturales de Jinan invitadas por la dirección del espacio museístico.
En la inauguración, Ripollés dedicó palabras de agradecimiento al museo de Shandong y se congratuló de «posibilitar la comunicación entre Occidente y la ciudad de Jinan» a través de un vehículo «aceptado por todas las nacionalidades del mundo», como es la cultura, en palabras del artista. «La recepción ha sido impresionante», dijo.
El museo también quiso agasajar a Ripollés con una exhibición de baile flamenco y una audición de piezas de música clásica española a cargo de un chelista y una violinista durante el mismo acto de apertura de la exposición.
Hasta el 1 de septiembre, el público podrá contemplar 32 esculturas de diferente material, como la resina, el bronce o el hierro, 34 grabados matéricos con partículas de cristal o metales integradas sobre el color y 20 cuadros de gran formato con los que Ripollés «expresa su inagotable vitalismo y la interpretación de la relación del hombre con la naturaleza».
Además, en las escalinatas exteriores del museo y en el hall, se han colocado cuatro esculturas de gran formato como las que han recorrido previamente otras capitales europeas, creadas en bronce y en fibra recubierta de cristal de Murano.
Según han indicado las mismas fuentes, Ripollés también compartió con niños el estreno de la muestra y ha pintado con un grupo de escolares un cuadro de grandes dimensiones, una actividad que destaca que le motiva especialmente porque hoy en día, con 80 años, se siente «como un niño».
Para el pintor y escultor castellonense, esta exposición reviste una gran importancia debido a que la provincia de Shandong es «la cuna del Confucio», por lo que se trata de uno de los centros culturales más importantes de China.