Juan Eduardo Zúñiga, el escritor que hace música con las palabras, el artista del lenguaje, ha sido galardonado hoy a sus 87 años con el premio Nacional de las Letras Españolas, el galardón más importante tras el Premio Cervantes.
Dotado con 40.000 euros, el jurado de premio que concede el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte al conjunto de la obra literaria de un autor español, escrita en cualquiera de las cuatro lenguas oficiales del país, ha reconocido así toda «una vida dedicada a las letras».
Una vida «en la que ha sido un maestro tanto en el género del cuento, realista y fantástico, como en el ensayo literario y la traducción», según dice el acta del jurado.
Y es que el escritor, traductor y crítico, nacido en Madrid en 1929 es uno de los autores más reconocidos en España, calificado como un «escritor de escritores», Zúñiga es un maestro del lenguaje, preciso y certero, un exquisito como ha señalo el escritor Manuel Longares.
«Tiene una obra exquisita no muy extensa y que no solo se dedica a la Guerra Civil. Este tema ocupa una parte importante con su trilogía pero tiene libros de fantasía, libros de creación muy personal y lindando con lo fantástico y el surrealismo. En fin, la obra de Juan es muy amplia y con muchos matices distintos», ha subrayado Longares, al tiempo que ha precisado que «por fin se ha impuesto la lógica literaria».
«Hablamos de una figura indiscutible de las letras españolas y un miembro de la generación de los 50 que ha seguido la línea heterodoxa frente a la línea predominante en el grupo y hoy por fin hoy ha sido reconocida», ha recalcado Manuel Longares.
Firme defensor de la novela como reconstrucción de la memoria, Zúñiga es muy conocido por su trilogía de la Guerra Civil en Madrid que empezó con «Largo noviembre en Madrid» (1980) y completó con «La tierra será un paraíso» (1986) y «Capital de la gloria» (2003).
El autor madrileño estudió Bellas Artes y Filosofía y Letras y se especializó en literaturas eslavas y en el siglo XIX español. Ha editado numerosos estudios y ensayos como especialista en literaturas eslavas, principalmente la rusa y la búlgara.
Entre sus obras, y como experto en lenguas eslavas -incluso tiene aspecto de autor ruso del XIX delgado y con una barba muy poblada- destaca una biografía de Turgueniev titulada «Los imposibles afectos de Ivan Turgueniev» (1977) y varios ensayos sobre escritores rusos como Chéjov.
Además de numerosos artículos acerca de la cultura búlgara. Su primer ensayo, titulado «La historia de Bulgaria», lo elaboró en 1945.
También ha traducido a importantes novelistas y poetas de los países del Este, y a autores portugueses, entre los que destacan Urbano Tavares Rodrigues o Mario Dionisio.
En 2003 cerró con «Capital de gloria», un decálogo de relatos ambientados en los últimos días del Madrid republicano con el que obtuvo el Premio de la Crítica de Narrativa en castellano y el Premio Salambó.
En el acto de presentación de «Capitán de gloria» recibió un homenaje de los escritores Antonio Muñoz Molina, Luis Mateo Díez, Antonio Martínez Sarrión o Manuel Longares, entre otros muchos.
Ese día el escritor y académico Luis Mateo Díez señaló que la obra de Zúñiga «debe acercarse a mucha más gente para que puedan descubrir la extraordinaria sensibilidad del escritor y su depuración entera con el lenguaje».
Y Muñoz Molina le calificó con una frase de Van Der Rohe: «Menos es más». «Este autor cuenta las cosas fundamentales con un efecto poético tremendo. Leerlo es escuchar música», dijo.
El jurado que ha fallado el Premio Nacional de las Letras 2016 ha estado presidido por el director general de Industrias Culturales y del Libro, José Pascual Marco, y la subdirectora general de Promoción del Libro, la Lectura y las Letras Españolas, Mónica Fernández, ha actuado como vicepresidenta.
Y han formado parte del mismo, el autor galardonado en la edición 2014, Emilio Lledó; la autora galardonada en la edición 2015, Carme Riera; Pedro Álvarez de Miranda; Xesús Alonso y Aizpea Goenaga.
Además de Jordi Cornudella, Manuel Rico, Anna Grau; Fernando Valls, Paloma García Picazo, Rafael Luis González, y Fernando Rodríguez Lafuente.