Marga y Cristina Palau nunca habían dirigido una empresa hasta que en el año 2009 asumieron la dirección de OfiGrup a les Illes S.L, una compañía ibicenca dedicada a la venta de material y mobiliario de oficina, así como a otros servicios relacionados con el mundo de la empresa, como el diseño gráfico o la publicidad e imprenta. Pese a su juventud (Marga tiene 26 años y Cristina 33) tuvieron claro que en el año 2009 tenían que lanzarse a la aventura de dirigir su propio negocio. En la actualidad tienen dos tiendas y cuatro trabajadores a su cargo, además de ellas dos que trabajan cada día en su negocio, y reconocen que no hay nada malo ni negativo a la hora de trabajar con la familia. “Trabajamos muy a gusto; puede que tengamos algún roce pero como podría pasar con cualquier otro compañero de trabajo”, explica Cristina.
“Era una empresa familiar que antes se llamaba Ibitec; el local de la tienda es nuestro en propiedad y en 2009 nos traspasaron el negocio, que estaba muy asentado y funcionaba porque tenía una cartera amplia de clientes, alrededor de medio millar. Al ser un negocio que ya estaba en funcionamiento vimos que era viable continuar con la idea y nos decidimos a hacerlo porque teníamos ganas y nos gustaba la idea de trabajar juntas”, explica Marga, quien recuerda que asumieron las riendas de OfiGrup justo el año en que más se notó la crisis económica en Eivissa. “Se dio la casualidad de que cogimos el negocio justo el año en que más incidió la situación económica y, sinceramente, lo notamos”.
Fue entonces cuando impulsaron una tendencia de funcionamiento que hoy en día mantienen: reducir el almacenaje de artículos (stock), analizar anualmente cuáles son los productos que más se venden y “recortar compras a proveedores”. “Compramos lo que tiene alta rotación o directamente lo que piden los clientes, así les servimos rápidamente y no se acumula el stock. Cada año hacemos un estudio de demanda para ver los artículos que más se venden y tenemos un control exhaustivo del stock”.
La apertura en Eivissa de una gran superficie sueca dedicada a los muebles a bajo coste reconoce que les afectó “porque la gente veía que es algo nuevo, moderno y este tipo de empresas sí que pueden dañar al pequeño y mediano comercio de la isla. Por suerte conseguimos estabilizarnos y los clientes saben apreciar la calidad que les ofrece un negocio en el que los mismos empresarios que lo llevan están trabajando y se preocupan porque todo esté bien para sus clientes, y esto en las empresas grandes no pasa porque el cliente es un número más; pueden tener un precio más barato, pero no tienen la misma calidad”.
DIFERENCIACIÓN. Las hermanas Palau tienen claro que la diferenciación es clave en el mundo empresarial y, por eso, apuestan por abrir nuevas líneas de negocio. En la actualidad están trabajando en un nuevo proyecto que consiste en ofrecer un servicio integral desde que alguien tiene la idea de montar una empresa hasta que lo hace y necesita posteriormente material para el día a día. “Hemos decidido ampliar las ramas del negocio. Estamos trabajando en un proyecto con un grupo de diseñadores y arquitectos para que cualquier persona que quiera montar un negocio, ya sea una oficina o enfocado a la hostelería, tenga un servicio integral de asistencia de puesta en marcha de la empresa y el servicio posterior. La idea es ofrecer un proveedor único integral, que somos nosotros. A veces no tienes tiempo para pensar en el diseño de tu futuro negocio, los trámites administrativos son en ocasiones complicados… Hacemos toda la gestión para la puesta en marcha de un negocio y su andadura posterior”.
Cristina destaca, además, que han sabido adaptarse a la evolución de la demanda de un sector tan específico como la papelería y el mobiliario de oficina. Por ello, han incorporado artículos de manualidades que ahora están tan de moda y quieren impulsar talleres para los más pequeños que se harían en las tiendas. “Nos identificaban mucho con la imagen de que solo vendíamos a oficinas y mobiliario para empresas. Nuestra idea es habilitar un espacio para los más pequeños en las dos tiendas que tenemos donde se puedan hacer talleres de manualidades. Además estamos intentando trabajar con los colegios para promover estas nuevas ideas”.
CONCIENCIACIÓN. Pero sin duda el aspecto que más diferencia a OfiGrup del resto de empresas es su preocupación y concienciación por el cuidado del medio ambiente. De hecho, son la primera papelería de la isla que se ha pasado íntegramente a consumir energía renovable con su cambio a la cooperativa de energía Som Energia. En este sentido, la organización ecologista Som Energia impulsa desde hace 18 meses y con la colaboración de Ibiza Preservation Fund el proyecto Connecta't al sol, cuyo principal objetivo es aumentar el consumo de energías renovables, tanto de particulares como de empresas. De hecho, desde Amics de la Terra recordaron que, según datos del Ibestat, en las Pitiüses únicamente el 1% de la energía consumida se genera mediante renovables, algo que Cristina y Marga Palau consideran insuficiente y, por ello, han iniciado el cambio en ellas mismas y su negocio.
“Estamos muy involucradas en la lucha y el rechazo a las prospecciones petrolíferas en aguas de Balears. Se creó la Alianza Mar Blava y empezamos a colaborar con ellos en, por ejemplo, la recogida de alegaciones. En el caso de las prospecciones, por ejemplo, no solo debemos estar en contra sino realmente apostar por un cambio en el modelo energético. No es tan difícil”. Cristina asegura que tanto el tejido empresarial de Eivissa, Formentera y el resto de Balears así como los ciudadanos deberían empezar a tomar conciencia sobre el tema, aunque aseguran que para ello es necesario “mucha más información de la que hay. En general considero que falta muchísimo para que la gente tome conciencia de la importancia de consumir energía renovable, pero pienso que muchas veces es porque no estamos lo suficientemente informados”. Y añade: “Vendemos la idea de que estamos en una isla hippie, natural y estamos realmente rodeados de consumismo. Tenemos que aprender a vivir con el medio ambiente y respetarlo”.
Además de colaborar con Alianza Mar Blava, en 2011 crearon el grupo Temps de Savines cuyo principal objetivo es contribuir en la replantación de sabinas por la isla. En el año 2012 recibieron el premio Savina que entrega la entidad ecologista GEN “como reconocimiento a la defensa del patrimonio natural y cultural de Eivissa”, según explicaron. También colaboraron con los agentes de medio ambiente en la reforestación de Benirràs tras el incendio. “Queremos contribuir a salvar nuestro patrimonio para seguir creciendo con nuestros clientes de una manera sostenible”, añadieron.
Sobre los planes de futuro de la empresa, Cristina comenta que, cuando crearon la sociedad en el año 2009, la inscribieron como OfiGrup a les Illes. “Nuestra intención es, si todo va bien, en un futuro tener presencia tanto en Mallorca como en Menorca”.