Balears se llena. La temporada turística ha empezado de la mejor manera y las previsiones para los meses centrales -de junio a septiembre- son buenísimas. En 2022, superada la pandemia, llegó una contundente recuperación de la demanda y en 2023 continúan la misma tendencia.
Concretar la ocupación registrada durante los primeros meses del año es complicado, puesto que depende de las características del establecimiento y de la zona turística. De cara al verano, las previsiones para el verano son excelentes en todas las zonas y establecimientos. En todo caso, el comportamiento del consumidor ha cambiado y las reservas adelantadas, aunque se han recuperado, no alcanzan los niveles prepandemia.
El gran peligro es la masificación. Morir de éxito es el negro nubarrón que se atisba en el horizonte y que inquieta al sector turístico. La solución es complicada, aunque todos los actores consideran que debe pactarse desde el consenso. Otra cuestión es que desde la administración deben realizarse esfuerzos para paliar y minimizar los efectos de la llegada masiva de turistas. En este sentido, es evidente que la administración debe trabajar para solventar problemas como la falta de taxis o transporte público en algunas ciudades de las islas. En este sentido, desde el ayuntamiento de Palma se anunció días atrás la próxima adjudicación de 200 licencias temporales de taxi. Acabar con el turismo de excesos es otra de las grandes prioridades de las administraciones públicas, que desde hace años apuestan por la calidad como banderín de enganche de las islas.
Maria Frontera, presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca, no duda en catalogar el inicio del año como bueno. «Se están consolidando las aperturas tempranas. Es una tendencia que depende, en gran medida, de cuándo cae Semana Santa. Este año nos ha ido bien y se han conseguido buenas ocupaciones. Además, el valle que azotaba las ocupaciones tras la Semana Santa ha desaparecido», explica. En este sentido, los eventos deportivos son determinantes para mejorar la ocupación de zonas como la platja de Muro, Alcúdia o Cala Millor.
El mercado alemán es el de mayor importancia en Balears. Y con gran diferencia sobre el británico. La situación económica de Alemania despertó grandes incertidumbres meses atrás, pero la respuesta del mercado germano ha sido excelente. «La respuesta del mercado alemán hasta ahora, y también de cara al verano, es muy positiva. Los británicos también ofrecen una buena respuesta, aunque no tanto como los alemanes», señala Frontera. La presidenta de la Federación Hotelera explica también que la pandemia provocó una mejora tecnológica que está provocando una mejor comercialización. «Contamos ahora con una sofisticada estructura tarifaria que está provocando una diversificación en las ventas y unos mejores precios», explica.
Frontera valora muy positivamente el fuerte incremento que tienen, en general, los canales directos, lo que supone un aumento de la rentabilidad. Además, Frontera destacó también la implantación creciente de las agencias especializadas. La presidenta de la Federación Hotelera destacó el papel que aún tienen los turoperadores y destacó que las estancias de sus clientes acostumbran a ser más prolongadas que las de viajeros que han contratado con alguna OTA. La presidenta de la FEHM, por otra parte, aseguró que la administración debe trabajar para conseguir que Balears sea un destino 365 y explicó que deben resolverse los problemas de movilidad que tanto afectaron la temporada pasada a turistas y residentes.
ABRIL DE RÉCORD. Las estadísticas ya publicadas del mes de abril son de récord. Nunca habían llegado tantos turistas a los aeropuertos de las islas y, además, las pernoctaciones también se han disparado. En este sentido, durante el pasado abril se produjeron un total de 3.419.094 pernoctaciones. Es la cifra más alta de la historia en un mes de abril. Supera en un 21,41% las pernoctaciones de abril de 2022 y en un 11,56% las registradas en el mismo periodo de 2019, último año prepandemia. Destacar el excelente comportamiento del mercado alemán, que se ha incrementado mucho más que el británico. Destaca también el retroceso en las pernoctaciones de los turistas españoles.
En abril se produjeron un total de 1.316.695 pernoctaciones de turistas alemanes, que son un 20,47% más que un año antes y un 8,78% más que en abril de 2019. Las pernoctaciones de británicos aumentaron un 12,93% respecto al año anterior y el 3,54% en comparación con 2019. Las pernoctaciones de turistas españoles fueron de 295.818 en abril, que es un 12,10% menos que el año anterior y el 16,46% menos que en el mismo periodo de 2019. Por islas, las pernoctaciones se incrementaron un 20,23% en Mallorca respecto a abril de 2022 alcanzando los 3.170.697. En Eivissa-Formentera, las pernoctaciones aumentaron en abril de forma espectacular, puesto que fueron 213.146, que es un 72,46% más que un año antes. En Menorca, en cambio, las pernoctaciones se quedaron en 35.251, un 36,41% menos que un año antes.
Los indicadores de rentabilidad hotelera, publicados el pasado martes, son también históricos. Los ingresos por habitación (RevPar) disponible se situaron en abril en 75,7 euros en Balears, que es un 13,61% más que un año antes. Por islas, los mayores ingresos por habitación disponible se registraron en las Pitiüses, puesto que alcanzaron los 94,1 euros. En Mallorca se quedaron en 74,7 euros y en Menorca, pese a ser de 48,4 euros, fueron más altos que en 2022 y también se superaron los registros prepandemia. La tarifa media diaria (ADR), por su parte, fue también más elevada que nunca antes en abril en el conjunto de Balears. Alcanzó los 102,3 euros en Balears. En Mallorca, curiosamente, la tarifa media diaria se situó en 100,7 euros, pero en 2021 había alcanzado los 103,1 euros, quedándose en 96,1 en 2022. En Menorca, la ADR fue de 81,7 euros. En las Pitiüses alcanzó los 129 euros, pero un año antes había sido de 129,4 euros.
Por otra parte, AENA publicó días atrás los datos del tránsito de pasajeros en los aeropuertos de Balears durante el mes de abril. En total llegaron 1.883.788 pasajeros a los aeropuertos de Balears, un 12,18% más que en abril de 2022. El aeropuerto de Eivissa es el que registró un mayor incremento, puesto que los 351.743 pasajeros llegados en abril suponen un 21,52% más que un año antes.
En Mallorca, llegaron al aeropuerto de Son Sant Joan 1.411.656 pasajeros, que son un 10,85% más que un año antes. El aeropuerto de Maó, en cambio, registró un incremento mucho más moderado, aunque hay que considerar que en el pasado 2022 ya se habían superado las cifras prepandemia. En abril llegaron a Maó un total de 120.389 , que son un 3,49% más que en abril de 2022.