El Papa Benedicto XVI aceptó este viernes la renuncia del obispo de la Diócesis de Brujas (Bélgica), monseñor Roger Joseph Vangheluwe, después de que éste confesara haber abusado sexualmente de un menor. Además, en el comunicado donde el Papa acepta su dimisión y en el cual el hasta hora obispo admitió los hechos y pidió perdón: «Estoy profundamente arrepentido de lo que he hecho y pido sinceramente perdón a la víctima, a su familia, a toda la comunidad católica y a la sociedad en general», aseguró monseñor Vangheluwe, que fue ordenado sacerdote en el año 1963 y obispo en 1984.
«Cuando todavía era simple sacerdote y durante algún tiempo al inicio de mi Episcopado abusé sexualmente de un joven», admitió el prelado quien dijo que «La víctima todavía está marcada» por lo sucedido. «En los últimos decenios, he reconocido varias veces mi culpa y he pedido perdón a la víctima y a su familia», añadió. Sin embargo, «esto no le ha dado paz, ni a mi tampoco» y ahora, «la tormenta mediática de estas últimas semanas ha reforzado el trauma» y todo ello hace que «ya no sea posible continuar con esta situación».
"Voluntad de transparencia de la Iglesia"
Por su parte, el arzobispado de Bruselas, monseñor Andrés-Joseph Leonard, aseguró que la dimisión de Vangheluwe «corresponde a la voluntad de transparencia que la Iglesia católica de Bélgica quiere ahora aplicar rigurosamente en esta materia, pasado página con resolución respecto a la época, no tan lejana, en la que tanto la iglesia como fuera ella se prefería la solución del silencio o el ocultamiento».
«No es necesario decir que este evento será percibido muy dolorosamente por toda la comunidad católica belga, todavía más porque monseñor Vangheluwe era percibido como un obispo generoso y dinámico, ampliamente apreciado en toda su diócesis y en la iglesia belga», prosiguió Leonard. La situación es «particularmente seria» y nuestros pensamientos fueron «en primer lugar hacia la víctima y hacia su familia, de la que muchos miembros tienen ahora conocimiento por primera vez de esta sobrecogedora noticia». «Para la víctima se trata de un calvario que probablemente todavía no ha terminado», admitió el prelado de la Iglesia belga.
En cuanto a Vangheluwe, «tiene derecho, como persona, a la conversión, confiando en la misericordia de Dios, pero, en el plano funcional, era indispensable que, por respeto a la víctima y su familia y por respeto a la verdad, presentara la dimisión de sus funciones. Eso es lo que ha hecho y el Papa lo ha aceptado inmediatamente».
Casos "escasísimos"
El secretario general y portavoz de la Confederación Episcopal Española (CEE) y obispo auxiliar de Madrid, monseñor Juan Antonio Martínez Camino, manifestó que los casos de sacerdotes y religiosos pederastas son «escasísimos» en proporción con el número total de ministros, aunque todos «dolorosísimos y reprobables».
Durante la rueda de prensa con motivo de la conclusión de la XCV Asamblea Plenaria de la CEE, donde Camino reiteró las palabras de Rouco Varela del pasado lunes, día 19, donde dijo que «un solo caso ya es demasiado». Y en cualquier caso, reivindicó que «no se puede hacer uso de las estadísticas para hacer ver que dar a entender que se trata de un problema generalizado entre los sacerdotes, los religiosos y la Iglesia».
En ese sentido, mencionó que la Iglesia aplicará las normas sobre los que abusaron de los niños y apostó por «prevenir y sancionar» lo que calificó de «crímenes y desmanes». Y añadió que la Iglesia «no tiene nada en contra, ni le molesta que se investigue» porque «es algo plausible». Y por ello, las demandas contra el Papa por estos asuntos «no preocupan porque no tienen base jurídica». Finalmente, concluyó que lo fundamental es que «se proteja a los menores en todos los ámbitos» y que «la Iglesia desea estar en primera fila en la protección de los niños en estos abusos».