El Fondo Monetario Internacional (FMI) considera que la «incipiente» recuperación de la economía española será «débil y frágil» por lo que reclama la aplicación «urgente» de medidas de amplio alcance dirigidas a reequilibrar la economía y restaurar la confianza entre las que cita una reforma «radical» del mercado laboral, así como la consolidación del sector bancario y de las cuentas públicas.
La institución internacional, que el pasado 21 de abril había revisado al alza su pronostico para la economía española en 2010 al augurar una contracción del Producto Interior Bruto (PIB) del 0,4%, dos décimas menos que lo estimado en enero (-0,6%), y que mantuvo su previsión de crecimiento del 0,9% en 2011, señala en las conclusiones de la revisión del Artículo IV que el crecimiento de la economía española alcanzará de manera gradual entre el 1,5% y el 2% a medio plazo, aunque advierte de la necesidad de afrontar los desequilibrios existentes y de la incertidumbre vinculada al elevado desempleo.
Así, el Fondo apunta que, si bien estas previsiones están sujetas a una revisión al alza si el consumo doméstico creciera más rápido de lo previsto como consecuencia de un aumento de las exportaciones por la debilidad del euro y la recuperación de la economía global, también existe el riesgo de que la economía española se estanque como consecuencia del proceso de consolidación fiscal y del debilitamiento en la demanda privada, «especialmente si las reformas para impulsar la competitividad y el crecimiento son tímidas».
Asimismo, la institución advierte del riesgo de que se deterioren aún más las condiciones de los mercados financieros, lo que provocaría un encarecimiento de la financiación tanto del sector público como del privado.
Reformar para reestablecer la confianza
De este modo, el FMI insta al Gobierno a aplicar reformas «urgentes y decisivas» para reequilibrar la economía e impulsar la confianza, entre las que destacan las peticiones de incrementar la flexibilidad del mercado laboral, lograr la consolidación fiscal, así como la de reformar y consolidar el sector bancario para reforzar su solvencia y eficiencia. Asimismo, el FMI reclama que se continúen las reformas en el sector servicios.
En concreto, la institución dirigida por Dominique Strauss-Kahn reclama con carácter urgente una revisión «radical» del mercado laboral español «ambiciosa y amplia» que reduzca la dualidad existente mediante el abaratamiento del despido de los trabajadores indefinidos y que impulse la flexibilidad salarial mediante la descentralización de la negociación de convenios.
«Hay que tener cuidado de que ninguna reforma incremente los costes fiscales del sistema o dificulte a corto plazo la contratación temporal», advierte el FMI, que recomienda al Gobierno tomar la iniciativa en este aspecto si los agentes sociales no logran un acuerdo rápido sobre la reforma laboral.
Respaldo a las medidas de ajuste
Respecto a las cuentas públicas, el Fondo «respalda plenamente» el paquete de medidas adoptado por el Gobierno, incluyendo el recorte aprobado la semana pasada en el Consejo de Ministros, que fortalece «significativamente» el planeado ajuste fiscal y mejora la credibilidad por la asunción de medidas concretas y audaces, como el recorte de salarios en el sector público.
De este modo, el FMI considera que el nuevo programa de reducción del déficit, que implica la reducción del saldo negativo en más de cinco puntos porcentuales en 2010 y 2011, es «apropiado» y colocaría el ratio de deuda del Gobierno, que aún seguiría por debajo de la media de la eurozona, en una senda a la baja en un merco de tiempo razonable.
Por otro lado, la institución reclama acelerar proceso de consolidación del sector bancario español a pesar de reconocer la solvencia del mismo, destacando que es necesario acelerar la reducción del exceso de capacidad y dar origen a instituciones más sólidas.
Así, el Fondo subraya que los progresos realizados, en el marco de Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) han sido «demasiado lentos», aunque reconoce que el reciente acuerdo en este sentido de los principales partidos políticos es «alentador».
No obstante, el FMI ve necesario hacer muchos más progresos antes de que concluya el FROB en junio y cree que el Banco de España debe estar preparado para intervenir «rápidamente» en caso de que persistan señales de debilidad. «Con este fin, y para mejorar la confianza de los inversores, un 'diagnóstico' banco por banco exhaustivo y transparente basado en hipótesis conservadoras sobre la valoración de activos y perspectivas podría ser útil», agrega..
Asimismo, señala que el marco legal de las cajas de ahorro debe ser actualizado al nuevo contexto económico. Así, señala que el comportamiento de las cajas «altamente variado» y que es un sector que tiene «un papel importante que jugar», por lo que la actual estructura legal «no se adapta bien a las necesidades futuras de España».