La ciudad occidental de Changuinola, en la fronteriza provincia de Bocas del Toro, vivió ayer una nueva jornada de protestas de los trabajadores del sector bananero, que han dejado un muerto y unos cien heridos y han llevado a las autoridades a decretar un nuevo toque de queda.
Un día después de que choques entre trabajadores de la bananera Bocas Fruit Company y policía dejaran un muerto y un número de heridos que, según fuentes oficiales, superan el centenar, Changuinola, con 50.000 habitantes, volvió a vivir una jornada de enfrentamientos.
Los trabajadores reclaman el pago de un salario que se les adeuda y que, según el Gobierno, ya ha sido compensado, pero también reclaman la derogación de la Ley 30, recientemente aprobada por el Gobierno y que contempla restricciones al ejercicio del derecho de huelga y modifica disposiciones sindicales.
El secretario de Comunicación de la Presidencia panameña, Alfredo Prieto, indica que siguen los enfrentamientos en un par de barrios pese a que efectivos de la policía se desplegaron por diferentes puntos clave de la ciudad desde por la mañana.
Prieto dijo que aún no hay datos oficiales de los heridos o detenidos por los nuevos enfrentamientos.