La Justicia egipcia ha comenzado a actuar contra el ex presidente Hosni Mubarak y, de momento, ayer le prohibió salir del país y congeló todos sus bienes y cuentas bancarias, una medida que también afecta a su familia directa.
La decisión, anunciada por el fiscal general, Abdel Maguid Mahmud, se conoce una semana después de que las autoridades egipcias pidieran congelar las cuentas bancarias que la familia Mubarak pueda tener en el exterior.
«La congelación de los fondos de Mubarak allana el camino para su juicio, no solo por el dinero robado, sino también por los mártires» de la revolución que estalló el 25 de enero, declaró a el portavoz de los Hermanos Musulmanes, Esan el Arian.
Fuentes militares citadas por la edición digital del diario Al Ahram aseguraron ayer que Gamal Mubarak, hijo del ex presidente y considerado como su posible heredero político, intentó salir el domingo del país en un avión privado, pero fue impedido por las autoridades.
Mubarak se retiró a la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, en la península del Sinaí, después de anunciar su renuncia, el pasado 11 de febrero, tras 18 días de protestas.
Una inmensa fortuna
Según la agencia oficial de noticias egipcia, MENA, la orden de congelación incluye inversiones inmobiliarias, dinero en efectivo, acciones y cuentas en bancos y en compañías de Mubarak, su esposa, Suzanne; sus dos hijos, Alaa y Gamal; sus esposas y sus hijos menores.
El ex diputado egipcio Mustafá Bakri ha presentado ante la Fiscalía General documentos que señalan que la esposa y los dos hijos de Mubarak tienen cuentas bancarias secretas en Egipto. La denuncia da a conocer incluso los números de las cuentas bancarias y los nombres de los bancos donde están ingresados estos fondos.
De acuerdo con estos documentos, el hijo mayor de Mubarak, Alaa, tiene diez cuentas bancarias en el banco estatal Al Ahli, con unos veinte millones de dólares. La misma cantidad de dinero tiene el hijo menor, Gamal, también en varias cuentas bancarias. En cuanto a la esposa de Mubarak, tiene 147 millones de dólares en distintas entidades financieras locales.