Las tropas sirias bombardean hoy con gran intensidad por tierra y aire los barrios en manos del rebelde Ejército Libre Sirio (ELS) en Alepo, norte del país, mientras los insurgentes tratan de mantener sus posiciones.
El «número dos» del ELS, Malek Kurdi, explicó a Efe que las fuerzas gubernamentales bombardean «de forma indiscriminada» la mayoría de los barrios de Alepo.
«Las tropas del Ejército ya no se enfrentan directamente al ELS, sino que bombardean la ciudad con helicópteros, tanques y artillería pesada», pese a lo cual, señaló, no han conseguido doblegar todavía a los alzados.
Según el coronel desertor, los soldados del régimen han intentado avanzar para recuperar el barrio de Salahedin, uno de los feudos rebeldes, «pero el ELS ha repelido sus ataques y les ha causado importantes bajas».
Las fuerzas del Ejército Libre Sirio avanzaron este sábado hacia la sede de la radiotelevisión en Alepo, aunque los militares les obligaron a retirarse, tras lo cual permanecen apostados en los alrededores.
«Este régimen, ante la resistencia del ELS, está embarcado en una guerra insana en Alepo y los combatientes pelean ayunando, ya que ni siquiera tienen pan, pero lucharán sin descanso para impedir la entrada de las tropas en la ciudad», de la cual los rebeldes controlan el sur y el oeste, según Kurdi.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos señaló en un comunicado que en este momento se registran duros enfrentamientos en la Ciudadela de la ciudad, mientras que los vecindarios de Salahedin, Hananu y Al Firdus están siendo bombardeados.
El lugarteniente de los insurgentes criticó el papel de la comunidad internacional en la crisis, pese a la resolución de condena no vinculante aprobada el viernes por la Asamblea General de la ONU, y consideró que «el silencio mundial da libertad al régimen para atacar a su pueblo».
«¿Por qué no, de una vez por todas, se dejan de palabras y presentan ayuda material y armas al ELS?», se preguntó Kurdi.