París sirvió para confirmar posturas distantes en la crisis en Ucrania y permitió solo confirmar que el diálogo al menos continuará entre los múltiples representantes de la diplomacia internacional con intereses en ese país. Al final de una intensa jornada de contactos entre ministros de Exteriores, convocados en realidad a la capital francesa para hablar del Líbano, los principales responsables admitieron que el acuerdo consiste en que seguirán hablando de Ucrania.
Así lo declaró el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, que anunció concretamente un «acuerdo para proseguir las conversaciones con los rusos y ucranianos» para intentar resolver la crisis de Ucrania.
«Es muy importante resolver la cuestión por el diálogo, trabajamos por una solución», declaró Kerry a la prensa al final de una jornada en la que se reunió en la capital francesa con el ministro ruso de Exteriores, Sergéi Lavrov.
Lavrov había dicho lo mismo poco antes, tras negarse reiteradamente a reunirse con el nuevo representante de la diplomacia ucraniana, Andréi Deschitsa, que también había sido invitado a la capital gala. Pese a la ausencia de acuerdo concreto, Kerry se empeñó en considerar que se han producido «avances» y señaló que «es mejor la situación de hoy a la de ayer». Kerry excluyó la posibilidad de acuerdo sin contar con el Gobierno ucraniano, por lo que justificó la presencia en París del ministro de Exteriores de ese país.