Moscú amenazó ayer con suspender inspecciones internacionales de armamento nuclear en su territorio, recogidas por el tratado sobre la reducción de armas nucleares Start III, firmado entre Rusia y EEUU.
«Estamos dispuestos a ese paso en respuesta a las declaraciones del Pentágono sobre la suspensión de la cooperación entre las carteras de Defensa de Rusia y EEUU» por la intervención rusa en la república autónoma de Crimea, dijo un alto cargo del Ministerio ruso de Defensa.
Dado que «estas inspecciones son una medida de confianza, en las actuales condiciones de sanciones ya declaradas de facto por EEUU, no puede haber contactos bilaterales normales para el cumplimiento de los acuerdos» en materia de armas nucleares, advirtió el alto funcionario ruso.
«Gesto inamistoso»
«Las infundadas amenazas a Rusia por parte de Estados Unidos y la OTAN en relación a su política en Ucrania son vistas como un gesto marcadamente inamistoso y nos permiten actuar como en circunstancias de fuerza mayor», agregó.
El Gobierno de EEUU anunció hace dos días la restricción de visados y otras sanciones contra personas y entidades responsables de la intervención militar rusa en la península ucraniana de Crimea.
Washington también ha suspendido las conversaciones bilaterales con Rusia sobre comercio e inversión, y frenó los contactos entre militares de EEUU y de Rusia, incluidos los ejercicios, reuniones bilaterales, visitas portuarias y conferencias planificadas.
El tratado contempla que Rusia y EEUU deben reducir sus ojivas atómicas desplegadas hasta un máximo de 1.550 unidades en un plazo de siete años.