Al menos diez iglesias y varios edificios fueron incendiados hoy en la ciudad de Zinder, en el centro-este de Níger, en protesta por la presencia del presidente del país el pasado domingo en la manifestación de París en repudio por los atentados yihadistas que dejaron 17 muertos.
Según testigos presenciales, más de 4.000 personas salieron furiosas después de que en la oración del mediodía los imanes animasen a los fieles a protestar contra la participación del presidente, Issoufou Mahamadou, en la manifestación de París, donde, según ellos, «se blasfemó al profeta».
El Instituto francés, una escuela de misioneros y la sede del Partido Nigeriano para la Democracia y el Socialismo, formación del presidente, también fueron atacados.
Las fuentes relataron que varios manifestantes y miembros de las fuerzas del orden resultaron heridos, pero no se ha confirmado el número.
Los manifestantes también protestaron por el último número del semanario «Charlie Hebdo», en cuya portada se ve a Mahoma entristecido y derramando una lágrima mientras muestra el eslogan «Je suis Charlie» (Yo soy Charlie), rematado por el titular «Todo está perdonado».
El mundo musulmán, tanto en su rama mayoritaria suní como en la minoritaria chií, reaccionó negativamente a la publicación de este último número, que ha calificado de provocación.