Al menos 13 personas han muerto, según fuentes oficiales, por la explosión de un coche bomba este sábado en las inmediaciones del estadio del club de fútbol Besiktas, en Estambul (Turquía), después de la finalización del partido que enfrentaba al equipo de la ciudad contra el Bursaspor, según ha confirmado el ministro del Interior, Suleiman Soylu.
Las autoridades turcas están convencidas de que se trata de un atentado terrorista contra las fuerzas de seguridad. "La bomba estalló en el lugar donde se encontraban nuestras fuerzas de Policía", ha indicado el ministro. Tanto el presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, como el primer ministro turco, Binali Yildirim, han sido informados del incidente y están en permanente contacto con las fuerzas de seguridad en la escena del ataque.
Según el ministro del Interior, un coche bomba estalló cerca de una furgoneta de las fuerzas especiales de la policía, ubicado cerca del estadio donde algo más de una hora antes se había disputado un partido del Besiktas contra el Bursaspor. Un gran número de ambulancias ha acudido al estadio, donde la policía ha tomado medidas de seguridad y acordonado la zona y rumores no confirmados de tiroteos en zonas cercanas, atribuidos luego a la propia policía, han sembrado el pánico en Estambul.
El estadio del Besiktas se halla a apenas 500 metros de la céntrica plaza de Taksim, donde se ubican numerosos hoteles, también en estado de máxima alerta. Las imágenes de la televisión turca han mostrado varias columnas de humo, con algunos focos de llamas, cerca de las instalaciones.
Bi patlama meydana geldi yine ve yeniden yaralılar var yardım gelsin #besiktas #patlama pic.twitter.com/0gCCjF2TkJ
— Ümmühan D. (@padilla1905) 10 de diciembre de 2016