El número de fallecidos por el tsunami que ha arrasado este domingo las costas que rodean el estrecho de Sunda, en Indonesia, ha aumentado a 281 personas, mientras que más de 1.000 han resultado heridas, según ha informado este lunes la Agencia de Mitigación de Desastres del país (BNPB).
Hasta el momento se habían contabilizado 222 víctimas mortales y 843 heridos como consecuencia de las olas, originadas tras una erupción del volcán Krakatoa.
El portavoz de la BNPB, Sutopo Purwo Nugroho, ha advertido de que al menos 57 personas continúan desaparecidas, por lo que se espera que el número de víctimas mortales por las olas pueda aumentar en las próximas horas.
El tsunami, provocado casi con toda seguridad por un gigantesco corrimiento de tierra submarino tras la erupción del volcán, ha afectado a varias zonas del estrecho de la Sonda, que separa las islas indonesas de Java y Sumatra, y sirve de enlace entre el mar de Java y el océano Índico.
Allí hay numerosas áreas turísticas, como precisamente una de las más afectadas, la playa de Tanjung Lesung, en la localidad de Pandeglang, donde al menos 250 empleados de la empresa estatal de servicios públicos PLN disfrutaban de un evento organizado por la compañía junto a sus familias.
Al menos 92 personas han muerto en esta playa, entre ellas siete asistentes al evento, según un portavoz de la empresa, que cifra en 89 el número de asistentes no localizados.
Otros 35 fallecidos han sido confirmados en Lampung Sur. Todavía no hay una estimación general en cuanto al número de desaparecidos.
Las primeras informaciones sobre daños materiales detallan al menos 430 viviendas casi destruidas, nueve hoteles «muy dañados» y decenas de embarcaciones afectadas, de acuerdo con el portavoz de la Agencia Nacional para la Gestión de Desastres, Sutopo Purwo Nugroho.
Las autoridades han advertido a los residentes y a los turistas que se encuentran en las zonas de costa a lo largo del estrecho que se mantengan lejos de las playas, ya que la alerta por tsunami y fuerte oleaje se mantendrá activa hasta el 25 de diciembre.
Los equipos de rescate continúan trabajando sin descanso entre los escombros para intentar encontrar a los desaparecidos.
Más de 1.000 personas resultaron heridas cuando el maremoto golpeó las costas de las islas de Jaca y Sumatra a última hora de la noche del sábado. Más de 3.000 residentes de esta zona costera, muy turística, han tenido que ser evacuados.