Dos hombres se están recuperando después de que su yate tuviera problemas en el mar y llegara a la costa de la isla de Achill, noroeste de Irlanda, cuando su viaje transatlántico poco más y acaba en desastre.
Según informa el Irish Examiner, parece ser que el yate de unos 15 metros de eslora volcó a principios de la semana pasada con dos hombres a bordo después de que el mástil del yate se rompiera en medio de una tormenta.
Sin embargo, no se emitió ninguna señal de socorro y posteriormente el yate fue a parar a un acantilado inaccesible cerca de Dooega Head, al sur de la isla de Achill.
El yate y la tripulación estuvieron allí tres días antes de que uno de ellos escalara los peligrosos acantilados con fuertes vientos y diera la alarma en Dooega el viernes.
Los guardacostas de la isla de Achill, con la ayuda del RNLI, acudieron al lugar. Debido a la inaccesibilidad de punto en el que se encontraban, el segundo miembro de la tripulación tuvo que ser trasladado a un lugar seguro por el helicóptero Rescue 118 y fue trasladado al Hospital Universitario Mayo de Castlebar, donde sigue siendo atendido.
Por otro lado, su compañero también fue ingresado en el hospital, pero ya ha sido dado de alta y está siendo alojado en la localidad.
Las autoridades a cargo del caso informaron de que ambos hombres estaban demacrados y deshidratados. Los hombres dijeron a los socorristas que uno de ellos es español y el segundo es de Colombia aunque ninguno de los dos viajaba con pasaporte pero explicaron que habían salido de un puerto del Caribe y que esperaban llegar a Ibiza.
El sábado, los agentes de aduanas llevaron a cabo una inspección del lugar donde quedó varada la embarcación pero no se encontraron equipos de navegación, pruebas incriminatorias ni documentación identificativa de ningún tipo. Tampoco había comida ni agua a bordo, señalan.