Entre las muchas medidas impulsadas por la Unión Europea para avanzar en su transición verde está una radical transformación de los edificios, responsables, señala Bruselas, de casi un 40% de las emisiones de efecto invernadero. La UE quiere acelerar los planes para rehabilitar el parque de viviendas y por otro lado diseñar cómo serán los edificios del futuro. Dentro de este objetivo, también está decidiendo cómo deberán ser los garajes para cumplir las exigencias climáticas de la Unión, según el medio Libre Mercado.
Ese objetivo de la UE se traduce en que los garajes del futuro, tanto los existentes como los de nueva construcción, tendrán que transformarse para adaptarse al horizonte de vehículos eléctricos y a los objetivos de edificios "cero emisiones".
El texto que aprobó el Parlamento Europeo sobre la futura reforma de la Directiva sobre Eficiencia Energética de Edificios señala que los coches eléctricos desempeñarán "un papel crucial en la descarbonización" y llama a aprovechar "plenamente" su "potencial" mediante la instalación de infraestructuras de recarga de acceso público en los aparcamientos.