Las autoridades libanesas han informado de que 1,2 millones de personas han tenido que abandonar sus hogares por la oleada de bombardeos llevada a cabo por Israel, que el lunes anunció una incursión «selectiva y delimitada» en el sur del territorio libanés.
El coordinador de la comisión gubernamental de emergencia y ministro interino de Medio Ambiente, Naser Yasin, ha detallado que hay 160.200 personas registradas en centros de acogida, según ha recogido la agencia de noticias NNA.
Por su parte, el primer ministro libanés, Nayib Mikati, ha pedido este miércoles «un alto el fuego inmediato» y ha reiterado el compromiso del Gobierno para implementar la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
El repunte de las hostilidades en Líbano se enmarca en los enfrentamientos desde hace cerca de un año después de que Hezbolá atacara territorio israelí un día después de los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023 por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza.