La Iglesia católica ha obtenido 252.682.547 euros a través de las más de 7 millones de declaraciones de la renta de 2009, correspondientes al IRPF de 2008, con asignación a favor de esta institución.
Según los datos facilitados hoy por la Conferencia Episcopal Española (CEE) en rueda de prensa, el número de declaraciones con asignación a favor de esta confesión se ha incrementado en 237.143, mientras que en los dos últimos años se ha producido un aumento de 711.975.
El secretario y portavoz de la CEE, Juan Antonio Martínez Camino, ha señalado que si se tiene en cuenta que un buen número de declaraciones son conjuntas (entre un 20 y un 25 por ciento), «podemos estimar que en la pasada primavera nueve millones de contribuyentes asignaron a favor de la Iglesia católica».
Los más de 252 millones de euros de recaudación total de la pasada campaña de la renta supone un incremento de más de 11 millones con respecto al ejercicio anterior.
La proporción de declaraciones a favor de la Iglesia es del 34,31 por ciento, un porcentaje similar a años anteriores, según ha señalado el vicesecretario de Asuntos Económicos de la CEE, Fernando Jiménez.
Martínez Camino ha asegurado que los resultados de este ejercicio «permitirán mantener el sostenimiento de las actividades básicas de la Iglesia en niveles de eficiencia y austeridad semejantes a los que han venido siendo habituales hasta ahora».
Ha explicado que para interpretar de manera correcta los datos hay que recordar que el incremento del coeficiente del 0,7 por ciento estuvo acompañado de la eliminación de la exención del IVA, desde el 1 de enero de 2007, que suponía para la Iglesia un ahorro de unos 30 millones de euros.
Esta cantidad debe ser compensada ahora por el nuevo sistema, por el que, según ha recordado también Camino, ha dejado de existir el denominado «complemento presupuestario», de tal forma que la Iglesia «sólo recibe lo que resulta de la asignación voluntaria de los contribuyentes».