El gobernador del Banco de España, Miguel Angel Fernández Ordóñez, advirtió hoy de que el mayor riesgo que planea sobre las entidades de crédito españolas es «el desempleo masivo», razón por la que reclamó que la reforma laboral se apruebe «pronto y con el mayor consenso posible».
En el «XVII Encuentro del sector financiero», organizado por Deloitte, ABC y la Sociedad de Tasación, Fernández Ordóñez aseguró que si se mantienen durante un periodo prolongado «millones de trabajadores en el paro» el sistema bancario podría pasar de «haber sido un soporte de la economía durante la crisis a convertirse en un obstáculo para conseguir la recuperación económica».
Por esta razón, consideró que si la reforma laboral se demora las entidades de crédito sufrirán más morosidad, menor negocio, mayor endeudamiento público y, en consecuencia, un encarecimiento de la financiación mayorista.
Además, se refirió al «terremoto regulatorio» internacional, que exigirá a las entidades mayores niveles de capital, por lo que valoró «muy positivamente» el anuncio del Gobierno de plantear una nueva normativa para afrontar este problema.
Aunque admitió que los cambios que supondrá el futuro marco regulatorio no se notarán de forma inmediata, recomendó a las entidades españolas que los vayan teniendo «muy en cuenta» y que lo hagan «cuanto antes» para poder planificar con tiempo una adaptación a este nuevo entorno «lo menos traumática posible».