El líder del PP, Mariano Rajoy, censuró ayer las medidas de ahorro contenidas en el último decreto-ley del Gobierno, ya que «dan un estacazo al débil» y revelan la «degradación» en la que ha caído el Ejecutivo y el «travestismo» del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero.
Rajoy demandó que con urgencia se proceda a «una dieta de adelgazamiento» de todas las administraciones, pues «gastan lo que no está en los escritos», y planteó la necesidad de una ley que abra la puerta a la privatización de las televisiones públicas en las comunidades autónomas.
También dejó claro que su partido no apoyará la congelación de las pensiones ni ninguna subida de impuestos, si bien no precisó si se refería a los planes del Gobierno para aumentar la presión fiscal a las rentas más altas.
Cuando toque convalidar en el Congreso el decreto-ley, los 'populares' votarán en contra de la no revalorización de las pensiones y harán lo mismo o se abstendrán en el resto de medidas.
Efectos sociales perversos
Además, los sindicatos se preparan para una huelga general. El secretario general de CCOO, Ignacio Fernández Toxo, anunció que el sindicato «trabaja desde ya como si este país fuera a vivir una huelga general». La materialización de esa medida «depende del Gobierno», indicó. El líder sindical advirtió asimismo de que la movilización pretende «tratar de evitar que el daño que las medidas que ha aprobado el Gobierno y otras que pueda aprobar se materialicen y lastren la evolución de la economía española con efectos sociales perversos».
En todo caso, señaló que tanto su sindicato como UGT van «a seguir apostando por el acuerdo». «Vamos a trabajar por mantener un clima de unidad de acción permanente imprescindible en este periodo, y si es el caso, en el momento adecuado decidiremos otro tipo de movilizaciones de mayor intensidad», señaló.
La confianza del Gobierno
Por su parte, el portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los Diputados, José Antonio Alonso, confió en que el Gobierno cuente con «mayoría suficiente» en la Cámara para aprobar las medidas, tras haber «tomado la temperatura» entre los distintos grupos políticos. Así, apeló a la «responsabilidad histórica» del PP en la aprobación del real decreto «que está siendo concertado por toda la Unión Europea».
Mientras, el coordinador general de IU, Cayo Lara, aseguró que Zapatero se ha convertido en un «enviado de especuladores», criticó que el recorte presupuestario sean «medidas del PP» y consideró el incremento de impuestos para ricos como un «falso debate» que oculte el «duro» ajuste contra los funcionarios, los pensionistas, dependientes y familias, pero no «contra especuladores».
Por otra parte, la Comisión de Sanidad y Asuntos Sociales de la CEOE ofreció ayer la colaboración del sector privado en la gestión de los servicios sanitarios y sociales con la Administración central, las comunidades autónomas y los ayuntamientos ante el recorte del gasto público.
Rajoy dice que las medidas económicas revelan «la degradación y el travestismo de Zapatero»
Agencias | Madrid |