La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández del Gobierno, ha anunciado que el jefe de la diplomacia, Miguel Angel Moratinos, se entrevistará a primeros de septiembre con su colega marroquí, Taieb Fassi Fihri, y ha confirmado que el Rey mantendrá un encuentro «informal» con el monarca alauí, Mohamed VI, cuya fecha y lugar están por fijar.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha querido restar trascendencia a estas dos entrevistas ya que en su opinión la tensión vivida en la frontera de Melilla después de que el Gobierno marroquí denunciara presuntos comportamientos racistas por parte de la Policía y la Guardia Civil contra ciudadanos marroquíes e inmigrantes subsaharianos se ha «reconducido».
De la Vega ha enmarcado el futuro encuentro entre el Rey y Mohamed VI dentro de «la relación habitual entre los dos monarcas», que «comporta que de vez en cuando se produzcan este tipo de reuniones informales», la última de las cuales tuvo lugar «hace dos años». También se ha referido a la próxima reunión entre los dos jefes de la diplomacia como algo habitual entre dos países «socios y amigos» y entre dos ministros «que mantienen una relación muy intensa».
Sobre la visita que efectuará el titular del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, a Rabat el lunes para entrevistarse con su colega marroquí, ha señalado que el objetivo de la misma es «incrementar aún más si cabe la cooperación entre ambos países en materia de seguridad».
"Los malentendidos se aclararon"
De la Vega ha evitado ponerle un calificativo al último episodio vivido con Marruecos este verano, después de que Moratinos haya negado que se tratase de un «conflicto» o «crisis». Lo importante para ella es que «la relación está reconducida» y que los «malentendidos se aclararon», según ella, «hace semanas».
Fuentes del Gobierno han afirmado que se solucionaron incluso antes de la llamada del Rey al monarca alauí el pasado 11 de agosto, a pesar de que con posterioridad hubo protestas y bloqueos sobre Melilla por parte de asociaciones civiles marroquíes. Las mismas fuentes han negado que el fondo de este desencuentro con Rabat tenga que ver con la reivindicación marroquí sobre Ceuta y Melilla.
De la Vega ha censurado la actuación del PP ante este episodio, que ha calificado de «oportunista». «Es inaceptable que el PP quiera hacer política partidaria a costa de las relaciones entre Marruecos y España, entre otras cosas porque nuestras relaciones son hoy más prósperas y fructíferas que nunca lo han sido (...) en todos los niveles y eso es fruto de un trabajo diplomático serio y riguroso, muy alejado del ardor guerrero al que nos tenía acostumbrado el PP cuando gobernaba», ha señalado.
«Mientras unos trabajamos por rebajar la tensión, por acomodar, solucionar, construir consensos, el PP se dedica a la escenificación oportunista y desleal», ha continuado, en alusión a las visitas del vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, y del ex presidente del Gobierno José María Aznar.
Melilla, más protegida que en 2004
También ha acusado a los 'populares' de no ser «serios» y de visitar a los melillenses «sólo cuando están en campaña electoral». Ha precisado que los vecinos de la ciudad autónoma tienen en la actualidad más recursos en infraestructuras y en temas sociales que en 2004, además de que cuentan con «más del doble de agentes fronterizos que en ese año, un 35 por cierto más de efectivos en toda la ciudad, más de un millar de policías y guardias civiles». «Eso es una manifestación de lo que significa apoyar de verdad, compartir y estar con los melillenses y el resto son palabras retóricas, artificiales, oportunistas que ni el PP se cree», ha afirmado.
Preguntada si el Ejecutivo ha mantenido informado al PP sobre lo que ocurría en Melilla y si le informará tras los próximos encuentros de las autoridades españolas con las del país vecino, ha señalado que el Gobierno informa «siempre» al PP de «todas las actuaciones relevantes, sobre todo cuando se trata de la política exterior». Se hace, ha añadido, de forma bilateral y a través de las comisiones parlamentarias correspondientes.
En relación con las comparaciones que desde ciertos sectores de la opinión pública se han hecho entre la visita de Aznar a Melilla y la que hizo Zapatero a Mohamed VI estando en la oposición y en plena crisis entre ambos países, De la Vega se limitó a señalar que el líder socialista «se ha caracterizado toda su vida por hacer viajes y actuaciones políticas tanto cuando ha ido presidente del Gobierno como cuando ha estado en la oposición de una forma absolutamente correcta».