El Estado tuvo hasta septiembre un déficit de 36.363 millones de euros, equivalente al 3,45% del PIB, lo que supone un descenso del 42,1% con respecto al saldo negativo de las cuentas de la Administración Central en el mismo periodo del año anterior, y con un incremento del 57,1% en la recaudación por IVA.
Según los datos facilitados hoy por el secretario de Estado de Hacienda, Carlos Ocaña, el impacto de la subida del IVA en julio ha reportado hasta septiembre 630 millones de euros adicionales, en un contexto en el que el consumo ha aumentado moderadamente, «a pesar de que algunos decían que ese incremento impositivo lo perjudicaría».
El déficit del Estado fue el resultado de unos ingresos por valor de 96.135 millones de euros, el 32,7% más, frente a unos gastos de 132.498 millones, el 2% menos.
En términos de caja -que computa los ingresos y pagos cuando se efectúan y no cuando se comprometen, como hace la contabilidad nacional-, el Estado registró hasta septiembre un déficit de 37.939 millones, el 39,6% menos del que tenía en el mismo periodo de 2009 (62.800 millones).
Los ingresos no financieros, que aportan datos del conjunto de las Administraciones Públicas, antes de descontar la participación de las Administraciones Territoriales, supusieron 128.464 millones, el 9,9% más.
Los ingresos impositivos, que representan el 92% del total, crecieron el 13,5%, debido a las medidas de consolidación fiscal -que hasta la fecha han proporcionado una entrada de 4.000 millones-, al descenso de las devoluciones por IVA y a la mejora de la situación económica.
Los ingresos directos generaron 63.683 millones, el 0,4% menos, como consecuencia de la caída del 21,3% en el Impuesto sobre Sociedades.
Por su parte, los impuestos indirectos crecieron el 35,7%, debido al aumento del 57,1% en la recaudación por IVA hasta los 37.410 millones.
Este aumento, según Ocaña fue resultado de la disminución de las devoluciones en un 35,4% por los menores importes solicitados de IVA anual y los mayores ingresos por aplazamientos concedidos en periodos anteriores, así como por el incremento de los tipos impositivos y el aumento de las bases imponibles por la mejoría económica.
Los impuestos especiales aumentaron sus ingresos en el 4,2%, con una subida del 6,1% en el Impuesto sobre el Tabaco y del 2,3% en el de Hidrocarburos.
Además, los pagos no financieros sumaron 130.616 millones, el 2,2% menos.
Ocaña aseguró que la supresión de los ministerios de Igualdad y Vivienda permitirá ahorrar unas cifras que «no son significativas, y que son difíciles de calcular porque esos ministerios son reabsorbidos por otros».
Al cierre del tercer trimestre del año, el Estado presentó una necesidad de endeudamiento de 43.209 millones, frente a los 85.290 millones del mismo periodo del año anterior, el 49,3% menos.