El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, llamó ayer «embozado» al líder del PP, Mariano Rajoy, por no querer hablar de cuestiones como el Estatut, y emplazó a CiU a aclarar si pactará con el PP «que inventó la catalanofobia».
Rubalcaba intervino ayer en el mitin del PSC en Tarragona, donde reivindicó la labor desarrollada por los gobiernos español y catalán en los últimos años, y en especial la aprobación del Estatut, que se ha aplicado, dijo, «sin desgarros en el conjunto de España», pese a los avisos de ruptura lanzados por el PP.
«Es nuestro Estatuto y lo vamos a defender», aseguró Rubalcaba, que añadió que «la diversidad no es incompatible con la solidaridad e igualdad del conjunto de españoles».
Recordó también que ayer estaba en Vila-seca, muy cerca de Tarragona, «el embozado», tal y como llamó a Mariano Rajoy, que últimamente viene mucho a Cataluña, dijo, «pero de esto no habla».
«Se ha olvidado de que España se rompía, que era un Estatuto que iba a establecer diferencias intolerables entre las comunidades autónomas, del recurso del Estatuto, de que cabalgó como nadie la catalanofobia en España. Se ha olvidado de eso», subrayó.
Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, subrayó ayer que el «nacionalismo cuesta mucho dinero en términos de presupuesto y en términos económicos», así como la incidencia negativa que tienen las «obligaciones identitarias» sobre la marcha de la economía.
En un mitin en Vila-Seca (Tarragona) ante un millar de personas, el líder del PP y la candidata del PPC a la Generalitat, Alícia Sánchez-Camacho, acusaron a CiU de «copiar» su programa económico.
Rajoy se felicitó de que la federación vea en el programa del PP «buenas ideas», pero advirtió: «Hay un problema, que es que el nacionalismo cuesta mucho dinero en términos de presupuesto y económicos, de normas, de decretos, de leyes, de regulaciones, y por tanto a Cataluña eso no le interesa».
Obligaciones identitarias
«No interesa a nadie que haya un gobierno que acabe machacando una política económica por imponer obligaciones identitarias», apuntó en la misma línea Rajoy.
El líder del PP se refirió también al acto político que ayer celebraron en Tarragona el vicepresidente Alfredo Pérez Rubalcaba y el aspirante del PSC a la reelección, José Montilla, para apuntar con ironía: «Vienen a explicar lo bien que lo han hecho, el empleo que han creado, las expectativas de futuro de la economía española».
«Han gobernado con mucha incompetencia», aseguró el líder del PP, que cree que el relato económico de los socialistas «no tiene crédito».
Por su parte, Sánchez-Camacho recurrió a un villancico catalán para asegurar que ambos dirigentes socialistas van a vender «humo»: «Fum, fum, fum!», apuntó.