Los empresarios Gerardo Díaz Ferrán y Gonzalo Pascual han sido imputados por los juzgados de Instrucción número 10 y 13 de Madrid por un presunto alzamiento de bienes, a raíz de las querellas presentadas por dos acreedores del grupo Marsans.
La situación de ambos empresarios se ha complicado notablemente desde que las sociedades más importantes del grupo turístico fueran declaradas en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) a mediados de 2010, ya que se han iniciado al menos media docena de procedimientos en la vía penal por presuntos delitos de apropiación indebida, delito societario y alzamiento de bienes.
Las investigaciones más complejas serán las relativas al alzamiento de bienes, que han sido puestas en marcha tras la presentación de dos querellas por parte de una empresa hotelera y de una sociedad vinculada al antiguo presidente de Air Comet, Antonio Mata Ramayo.
Según el ex socio de Díaz Ferrán y Pascual, la matriz de Marsans (Teinver) repartió a mediados de 2008 dividendos por importe de 178,95 millones de euros, poco antes de no pagarle 10 millones de euros pendientes del acuerdo de venta de su participación en la aerolínea.
Mata Ramayo considera que sus antiguos socios actuaron de forma dolosa y maliciosa, ya que distrajeron fondos de Teinver en favor de otras empresas de su propiedad, a sabiendas de que con ello no iban a poder hacer frente a las cuantiosas obligaciones de pago que tenía la matriz del grupo frente a terceros.