Varias decenas de miles de personas han tomado parta esta tarde en Bilbao en una manifestación para reclamar «soluciones para Euskal Herria», convocadas por los partidos, organizaciones sociales y sindicatos firmantes del Acuerdo de Gernika.
Al término de la manifestación dirigentes de dos de las organizaciones firmantes de ese Acuerdo, Belén Arrondo, del sindicato de la enseñanza STEE-EILAS, y Ainhoa Etxeaide, secretaria general de la central sindical LAB, han leído un manifiesto en el que han hecho un llamamiento a los estados español y francés «a que se sienten y dialoguen cuanto antes con ETA para dar salida a las consecuencias de décadas de confrontación armada».
La cabeza de la marcha ha partido sobre las 17:45 de las inmediaciones de la plaza de la Casilla encabezada por una pancarta con el lema de la convocatoria «Euskal Herriak konponbidea nahi du» (Euskal Herria quiere una solución) sujetada por algunos familiares de presos de ETA.
Tras ellos han caminado dirigentes de las formaciones firmantes del Acuerdo de Gernika, entre ellos los principales líderes de la izquierda abertzale, como Rufi Etxeberría, Jone Goiricelaia, Iñigo Iruin o el exdirigente de ETA Eugenio Etxebeste «Antxon».
También han acudido los líderes del resto de firmantes, como Pello Urizar (Eusko Alkartasuna), Oskar Matute (Alternatiba), Patxi Zabaleta (Aralar) así como representantes de sindicatos nacionalistas.
La cabeza de la manifestación se ha ido abriendo paso a lo largo de la calle Autonomía entre los miles de participantes que esperaban agolpados a ambos lados de la calle para irse sumando a su paso.
A lo largo de la manifestación se han coreado consignas en favor del regreso de los presos de ETA a casa, de la amnistía y de la independencia. También se han dado gritos de «sin amnistía no habrá paz».
La manifestación ha llegado, una hora después de su salida, ante las escalinatas del Ayuntamiento de Bilbao donde representantes de las organizaciones firmantes han leído el manifiesto en el que se reclama una solución «íntegra» que de salida a todas las claves del conflicto, a sus causas y a todas sus consecuencias».
Los convocantes han señalado que las propuestas de la Conferencia de San Sebastián son «válidas para promover la solución que traerá una paz duradera», pero han advertido de que «carecen de recorrido si sus receptores no responden positivamente».
Han recordado que ETA «ha respondido ya» y ha generado con ello «un escenario político para la esperanza desconocido hasta hoy» y han reclamado a los Estados español y francés que «se sienten y dialoguen cuanto antes con ETA para dar salida a décadas de confrontación armada».
«Y junto a las consecuencias -han añadido- se debe dar respuesta también a las causas de este conflicto y para ello reivindicamos la necesidad de diálogo político», han subrayado.
Los convocantes de la marcha, en su manifiesto, han proclamado que en este momento es la ciudadanía vasca, por encima de partidos e instituciones, la auténtica «llave decisiva en este nuevo escenario».
«Vamos a abrir -han anunciado- las puertas del derecho a decidir a Euskal Herria y las puertas al respeto a todos los derechos para todos».
El acuerdo de Gernika, firmado el 25 de septiembre del 2010, pedía a ETA un alto el fuego permanente «como expresión de su voluntad para un abandono definitivo de las armas» y el acercamiento de los presos etarras al País Vasco.