El exgobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ha revelado ante el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu que el organismo regulador planeaba restarle competencias al expresidente de Bankia Rodrigo Rato cuando el Ministerio de Economía, dirigido por Luis de Guindos, le quitó «totalmente el control» de la situación, informaron fuentes jurídicas presentes en la declaración.
Fernández Ordóñez, que ha declarado durante más de tres horas y media como testigo en la causa en la que se investiga la fusión y salida a Bolsa de la entidad, ha asegurado que no tenía confianza suficiente en Rato por entender que carecía de experiencia bancaria para dirigir la entidad. Por ello, intentó negociar con él que se mantuviera como «presidente no ejecutivo» tras nombrar a un presidente con conocimientos bancarios, para cuyo puesto ya tenía «en mente» al actual presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.
Esta propuesta, que Fernández Ordóñez llegó a plantear en una conversación con Rato que se produjo entre el 17 de abril de 2012 y el 4 de mayo, perdió sentido, según el compareciente, cuando el Ministerio de Economía le quito el «control» sobre la crisis y provocó la salida del exvicepresidente del Gobierno.
El compareciente también ha criticado al entonces consejero delegado de Bankia, Francesc Verdú, al decir que no era la «persona adecuada» para el cargo por una cuestión de competencia. «Venía de un banquito», ha llegado a decir según varias fuentes presentes en la declaración, en referencia a Banca March, en la que ocupo el puesto de vicepresidente.