La Tarifa de Ultimo Recurso (TUR) de la luz bajará previsiblemente un 6,7% a partir del 1 de abril después de que la subasta eléctrica de este miércoles entre las comercializadoras habilitadas para el suministro a tarifa se haya cerrado con caídas de precios del 15%, indicaron a Europa Press en fuentes del sector.
El resultado de estas subastas, de las que depende el coste de la energía, tiene un peso cercano al 50% en el recibo de la luz, mientras que la otra mitad corresponde a los costes regulados del sistema eléctrico, también llamados peajes.
El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ya anunció que su departamento mantendrá los peajes en el segundo trimestre del año, con lo que la revisión final de la TUR dependerá exclusivamente del resultado de la subasta de hoy.
La caída en el coste de la energía es fruto de un descenso del 16,2% en el precio del producto base, que ha pasado de 54,16 euros por megavatio hora (MWh) en el trimestre anterior a 45,41 euros por MWh, y de los ajustes posteriormente practicados.
En la subasta, las cinco comercializadoras con capacidad para suministrar la TUR, que son Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, HC y E.ON, han adquirido 4.447 megavatios (MW) de carga base para cada hora del segundo trimestre, así como 380 MW de punta.
La de este miércoles ha sido además la vigesimosegunda de las subastas de electricidad entre comercializadoras de último recurso para fijar el coste de la energía de la tarifa eléctrica, conocidas como Cesur.
Esta puja es la primera que se celebra desde que el pasado 1 de enero comenzasen a aplicarse los nuevos impuestos eléctricos, que incluyen una tasa del 7% a la producción y gravámenes para algunas de las tecnologías que, como el gas, tienen carácter marginalista y acaban condicionando el precio final del mercado.
Más renovables y menos demanda
Esta circunstancia no ha impedido que se haya producido una bajada en el precio de la electricidad provocada por una mayor participación de las energías renovables en el mercado eléctrico y por el continuado descenso de la demanda, según las fuentes del sector.
La paradoja es que esta menor demanda y mayor contribución renovable que abarata el mercado eléctrico encarece al mismo tiempo la otra parte del recibo, la de los costes regulados, ya que la caída del consumo reduce los ingresos necesarios para responder a las previsiones de costes, mientras que las tecnologías 'verdes' aumentan las primas.
Este descenso de ingresos e incremento de costes regulados da origen precisamente al déficit de tarifa, que es una deuda del sistema eléctrico de 28.000 millones cuyo importe, según las previsiones de Industria, debería dejar de aumentar en 2013.
En la anterior subasta Cesur se produjo una subida cercana al 6% en el coste de la electricidad, lo que, sumado a la decisión del Gobierno de congelar los peajes, provocó un incrementó final de la TUR del 3,1%.
Un alivio
Tras la subasta de hoy y la previsible bajada de la TUR si Industria cumple lo prometido, los consumidores se encontrarán en pocos días con la mayor bajada trimestral de la tarifa eléctrica en años. Será un alivio, si se tiene en encuentra que el recibo se ha encarecido en un 60% en apenas un lustro.
Solo en 2011, la TUR subió un 10%, y en 2012 lo hizo un 5,4% adicional, sin incluir el 7% de más que los consumidores estuvieron pagando entre octubre y diciembre para acatar una sentencia del Tribunal Supremo que obligaba a reintegrar el encarecimiento no repercutido entre octubre de 2011 y marzo de 2012.
La confusión en torno al recibo de la luz llegó al paroxismo el año pasado, cuando el recibo llegó a «bajar subiendo y a subir bajando». En octubre de 2012 la TUR bajó un 2%, pero la subida del IVA y las refacturaciones del Supremo la encarecieron, mientras que en enero la TUR subió un 3%, pero el final de las refacturaciones la abarataron.