El Príncipe ha hecho un llamamiento a todos los españoles para que celebren este sábado, Día de la Fiesta Nacional, «lo que nos une» y reafirmen su compromiso con un «futuro compartido de concordia y progreso para todos».
Don Felipe ha pronunciado estas palabras en un brindis inusual durante la recepción en el Palacio Real con motivo de la Fiesta Nacional, a la que por vez primera no asiste el Rey, convaleciente de su última operación de cadera.
Al millar de invitados al acto, el Príncipe les ha trasladado un mensaje en nombre del monarca.
«Hoy es un día para celebrar lo que nos une, recordar nuestra historia milenaria y lo conseguido juntos», ha dicho el mismo día que hay una manifestación convocada en Cataluña para celebrar la Fiesta Nacional frente a la deriva soberanista del president Artur Mas.
«Pero sobre todo», en opinión del Heredero, este 12 de octubre debe servir para «reafirmar nuestro compromiso» con un «futuro compartido de concordia y progreso para todos».
«Si lo que nos une es mucho, mucho más es lo que cada día seguirá estrechando nuestros vínculos con la comunidad internacional», ha añadido, en un momento en que los independentistas sostienen, en contra de la postura del Gobierno y la propia Comisión Europea, que la independencia no les sacará automáticamente de la UE.
«España, con la Corona a su servicio, continuará trabajando siempre para garantizar ese progreso, ese porvenir, superando cualquier dificultad», ha asegurado.
Don Felipe no ha olvidado felicitar a la Guardia Civil y a Zaragoza, que tienen como patrona a la Virgen del Pilar, así como a todas las mujeres que llevan tan «digno» nombre.
Al inicio de su intervención, el Príncipe ha explicado que ha sido el Rey quien le pidió que trasladara este mensaje en una fecha «con tantas connotaciones para España y para la historia de toda la Humanidad».
Don Felipe ha puesto fin a su discurso invitando a los presentes a brindar por España y por el Rey.
Nunca antes en esta recepción había habido discurso oficial por parte del Rey, tan solo conversaciones informales -los llamados corrillos- de los miembros de la Familia Real con la prensa.