La exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, María Victoria Alvarez, ha avisado de que «van a salir más cosas» de toda la familia del expresidente de la Generalitat Jordi Pujol y ha subrayado que el patrimonio de la familia se cifra en «muchos miles de millones de euros».
«Ojalá salga todo», ha asegurado Alvarez durante una entrevista. Para ello, ha subrayado el papel de los periodistas, los jueces y la Policía Nacional, además del suyo. «Sin estas cuatro patas es imposible que hubiera salido a la luz», ha señalado.
Preguntada por el comunicado de Pujol en el que se informaba de que el dinero en el extranjero se debía a una herencia de su padre, ha indicado que en dicho comunicado ha sido «la primera vez» que ha oído hablar de ello. Según, ha manifestado puede ser que haya una herencia pero el dinero del que ella ha hablado, cree que «no es el dinero de una herencia».
A su juicio, parece «más factible» que se trate de dinero que proviene de comisiones porque durante el proceso «han salido varias empresas que han pagado en paraísos fiscales a la familia» aunque matiza que «se está estudiando en qué concepto». Eso sí, advierte que «curiosamente» son empresas que han trabajado para la Generalitat.
El casi impuesto revolucionario de Marta Ferrusola
Por otra parte, Alvarez ha afirmado sobre la mujer de Pujol, Marta Ferrusola, que conocía lo que hacían sus hijos, diciendo que escuchó una conversación telefónica con su hijo Jordi en la que le decía que «el dinero ya estaba donde tenía que estar». «Tal y como declaré frente al juez Ruz», ha recalcado.
Y ha añadido que era bien conocido que contratar con la floristería de Marta Ferrusola en Barcelona era «un impuesto revolucionario casi». «Cada persona que montaba un hotel, un edificio oficial, había que montar un jardín japonés o un jardín no se qué, incluido el césped del Camp Nou que se convirtió en un patatal», ha denunciado.
Los problemas empezaron al preguntar
Preguntada por el tren de vida de Jordi Pujol Ferrusola, Alvarez ha relatado que él le hablaba de los negocios que tenía y que funcionaban «muy bien» y lamenta que «al principio» pensó que «era un hombre exitoso en los negocios».
«Cuando empecé a ver una serie de cosas y empecé a preguntar, ahí empezaron los problemas», ha manifestado. Así, ha contado como la tacharon de «loca» y le decían que veía e imaginaba cosas. «No sólo me lo ha dicho él, sino mucha gente, también periodistas», ha criticado.
Alvarez ha insistido en que ella vio bolsas repletas de billetes de 500 euros «sacadas de Andorra para llevarlas a Madrid». «Esta gente ha funcionado con una prepotencia y tranquilidad, en todos los sentidos, espectacular», ha advertido.
Además, ha denunciado la «inmunidad» que poseía la familia porque «si cualquier persona hace movimientos de este estilo tiene miedo, ellos no, ni miedo, ni pudor sobre todo, ni ética, ni absolutamente nada». Finalmente, ha repetido que ella nunca ha recibido amenazas, y matiza que lo único ha sido «alguna presión o llamada». «Ahora tampoco, de ningún tipo», ha sentenciado.
La independencia es un lugar seguro para los corruptos, se esa forma hacen y deshace a su gusto sin que nadie los controle, si se tira de esta madeja puede caer la torre Mas alta.