Jordi Pujol Ferrusola, el primogénito del expresidente catalán, replicó con «la gente no va así por la vida», a la acusación de su exnovia Victoria Álvarez de que llevaba a Andorra mochilas repletas de dinero y, sobre las intenciones de ésta al denunciarle, dijo que él las exclusivas sólo las da en el juzgado.
Estas fueron algunas de las explicaciones que ofreció ayer el hijo mayor de Jordi Pujol durante su comparecencia de cinco horas ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, tras la que quedó en libertad al no haber pedido medidas cautelares ni la Fiscalía ni la Abogacía del Estado, han informado hoy fuentes de la defensa.
El hijo de Pujol no dio credibilidad a las acusaciones de su expareja, que lo denunció en 2013 por llevar dinero al principado en el maletero del coche, y aseguró que su relación con ella se limitó a un contexto íntimo.
«Yo las exclusivas las voy a dar únicamente en el juzgado», respondió al juez acerca de las razones que puede tener la mujer para denunciarle, dando a entender de este modo que sus verdaderos motivos pudieran ser la búsqueda de protagonismo mediático.
A lo largo del extenso interrogatorio, Pujol Ferrusola defendió que los movimientos de divisas por valor de 32 millones detectados por la Agencia Tributaria responden en realidad a la inversión en productos financieros de 7 millones que fueron dando beneficios y por los que en todo momento tributó en España.
Respecto a la razón de que se hayan detectado esos movimientos en trece países diferentes, dijo que muchos de esos productos financieros, como preferentes, aunque son españoles el domicilio de optimización fiscal del banco que los emite puede estar radicado en otro país.
También fue preguntado por varias operaciones sospechosas que aparecen en un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía, como la compra por parte de su exmujer Mercè Gironés de dos fincas rústicas en Palamós (Girona) a su cuñado en diciembre de 2002 por 217.000 euros, que vendió tres años después por 4,8 millones al recalificarse los terrenos.
Gironés, que también declaró ayer ante el juez durante dos horas, contestó que lo hizo porque este familiar necesitaba dinero y le aseguró que se modificaría el planeamiento urbanístico, lo que finalmente ocurrió.
Cuando se produjo la compra el ayuntamiento de Palamós estaba gobernado por CIU y la recalificación posterior se hizo estando ya el PSC.
Sobre otro negocio de construcción de redes eléctricas en Gabón, Pujol Ferrusola relató que viajó tres veces allí para conseguir contratos para Isolux, pero que quienes se encargaron de hacerlo fueron una pareja de hermanos conocidos suyos que viven en el país africano.
Además, cobró un 18 % del total del dinero que se pagó a estos hermanos por conseguir el contrato, según su defensa, que califica su actuación como la propia de un «dinamizador de negocios».
El primogénito de los Pujol relató ayer al juez su variopinta actividad profesional para justificar por qué cobró por intermediar en contratos públicos con empresas relacionados con temas tan diversos como la compraventa inmobiliaria, plantas fotovoltaicas, refinerías petrolíferas o «broker» de participaciones empresariales.
La defensa de Pujol Ferrusola ha defendido que la Fiscalía no pidiera ayer ninguna medida cautelar contra él, ya que a su juicio el informe de la UDEF en que se basa la imputación carece de «músculo» y no hay por tanto pruebas suficientes contra él, al tiempo que no existe riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas, ya que ha comparecido puntualmente en el juzgado.
Hoy ha declarado como testigo durante menos de media hora Cristina Isabel de Francisco, que fue secretaria del matrimonio en sus empresas y que aún ejerce como tal para Pujol Ferrusola.
El juez la citó porque aparecía como socia del matrimonio en la empresa Project Marketing Cat, pero ella se ha desvinculado de esta sociedad y ha explicado que se limitó a gestionar, por encargo de la pareja, la constitución de la misma y el nombre que se le iba a poner.
Para ello, ha dicho que abrió una cuenta a su nombre para el capital social pero que nunca la usó y que luego traspasó la condición de socia a Pujol Ferrusola y su exmujer, ha explicado la defensa del imputado.