El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, se ha comprometido este miércoles ante el resto de líderes de la UE a aumentar las ayudas de España a organizaciones de atención a refugiados como ACNUR.
Rajoy ha expuesto ese compromiso en la reunión del Consejo Europeo extraordinario celebrado en Bruselas en el que los Veintiocho han acordado una serie de medidas para intentar hacer frente al origen de la crisis de los refugiados.
Entre esas medidas prioritarias, propuestas por la Comisión Europea y que deben adoptarse antes del Consejo Europeo de octubre, figura la entrega de una financiación de mil millones de euros a ACNUR, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y otras agencias para responder a las necesidades urgentes de los refugiados.
Ha sido en ese contexto donde Rajoy ha avanzado que España se ha comprometido a aumentar en 3'5 millones de euros (hasta el entorno de los 7 millones) la partida prevista para este fin en los presupuestos generales del Estado.
El jefe del Ejecutivo, que ha explicado que ha habido en la cumbre un debate interesante de cara al futuro ante los problemas del asilo y la inmigración económica, ha recordado que también se ha pactado en la cumbre incrementar las relaciones con Turquía, donde ha recordado que hay más de dos millones de refugiados sirios, así como con Jordania y Líbano.
Además ha señalado que el próximo mes de noviembre habrá una cumbre en Malta de la UE y la Unión Africana para analizar los problemas de la inmigración económica y ha mostrado su satisfacción por el hecho de que en ella, después de que España lo llevara pidiendo mucho tiempo, Europa va a desarrollar un programa de cooperación con los países africanos.
«La única forma de que la gente deje de abandonar sus países, de arriesgarse a perder la vida y de ser manipulada por las mafias es que logremos elevar el nivel de vida y que la gente pueda vivir en su país de una manera digna», ha añadido antes de explicar que también se va a reforzar el control de las fronteras.
Para el presidente, se trata de decisiones que se dirigen a la raíz del problema de los refugiados y de la inmigración ilegal, un objetivo por el que ha dicho que lleva dando la batalla desde hace años.
El presidente del Gobierno ha reconocido que dar respuesta a la crisis de los refugiados es un asunto difícil y complejo que mueve a las opiniones públicas.
Por ello, ha dicho entender a los cuatro países del Este (República Checa, Eslovaquia, Hungría y Rumanía) que no han mostrado su acuerdo con el reparto de refugiados.
Pero frente a ello, ha insistido en que una de las señas de identidad de Europa es el derecho al asilo y el respeto a los derechos de las personas y sus libertades.
Ante la pregunta de si lo que pretende la UE es que no lleguen refugiados, ha precisado que de lo que se trata es de ayudar a la gente y resolver el problema en origen.
«La política inteligente, aunque sea de medio y largo plazo, es ayudar a esos países y que a la gente le vaya bien», ha añadido.
Respecto a la apertura de expediente por parte de Bruselas a varios países de la UE, entre ellos España, por no aplicar la normativa sobre asilo, ha dicho que se analizará este asunto, aunque ha mostrado su extrañeza por el hecho de que naciones como Alemania, Francia, Italia o España supuestamente no hayan cumplido.
Antes de participar en la cumbre, Rajoy ha mantenido una reunión con el primer ministro portugués, Pedro Passos Coelho, tras la que ambos han asegurado mantener una posición común respecto a la actitud que debe tener la UE para afrontar el problema de los refugiados.