El expresidente de la Comunitat Valenciana Francisco Camps ha negado que él recaudara dinero de mordidas que irían a parar a distintas cajas «B» que, según ha informado este lunes la Cadena Ser, existían en el seno del Partido Popular de la Comunidad Valenciana.
Según la información difundida por la emisora, que cita fuentes de la investigación, en el marco de la operación «Taula», en el PP valenciano había hasta 5 cajas «B» donde el partido ingresaría el dinero recaudado de mordidas a cambio de amañar contratos en las administraciones controladas por los populares.
Los investigadores de la UCO -según la Ser- consideran que el PPCV era una «organización criminal» y que el propio expresidente era el responsable de recaudar esas mordidas y el encargado de aportar ese dinero a la caja «B» del PP valenciano y nacional.
Camps ha asegurado que esas afirmaciones son «falsas en su totalidad» y que nunca ha recaudado dinero negro para el PP valenciano o el nacional.
El expresidente ha negado «de forma categórica» la información y ha asegurado que «ningún empresario le ha dado dinero en la vida», ni él ha llevado dinero negro a Madrid». Es una «enorme falsedad», ha añadido.
Según la información, los investigadores de la operación Taula aseveran que declaraciones de testigos que permanecen bajo secreto de sumario y las grabaciones del arrepentido Marcos Benavent, avalan sus sospechas en este sentido.
Afirman además que Francisco Camps operaba como «recaudador» de dinero negro en el PP valenciano, obtenido mediante el pago de mordidas por parte de empresarios que resultaban adjudicatarios de los concursos públicos amañados en distintas consejerías de la Generalitat valenciana, en el periodo 2003-2011.
Sobre este punto, Camps ha señalado que, no solo él no ha ejercido ese papel de recaudador, sino que está convencido de que «no ha existido» esa supuesta trama en las consellerías de la Generalitat durante el periodo en que él fue su presidente.
El expresidente, que niega «punto por punto» toda la información, ha indicado además que ha presentado una denuncia en el juzgado de guardia negando los hechos y exigiendo la persecución penal por la filtración del sumario de la operación Taula, que sigue bajo secreto.
En su escrito, Camps exige a la Ser que no difunda esta «falacia» y anuncia que ampliará la denuncia contra cualquier instancia que lo relacione «en cualquier grado de participación de los hechos investigados».