El portavoz adjunto del Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Íñigo Henríquez de Luna, ha mencionado el congreso que enfrentó en su día a los exdirigentes del PP José Ramón Bauzá y Carlos Delgado como ejemplo de primarias que «no dividen si se hacen bien».
Henríquez ha recordado que, tras resultar ganador, Bauza «integró al perdedor». De hecho, ha aseverado que las primarias son procesos que «legitiman mucho al ganador y si hay generosidad se produce integración en torno al ganador», ha recalcado, para subrayar que «la unidad del partido es muy importante».
El 'popular' ha avanzado además que, aparte de su tradicional enmienda defendiendo las primarias, llevará al congreso del Partido Popular enmiendas para limitar mandatos y avanzar en la separación de funciones entre el Gobierno y el partido.
Las cinco ponencias del XVIII cónclave del PP que tendrá lugar en Madrid entre el 10 y el 12 de febrero ya están en manos de las agrupaciones territoriales, que disponen de plazo hasta el 15 de enero para presentar enmiendas a los documentos.
Las enmiendas de Henríquez de Luna obligarán al partido a debatir abiertamente sobre la acumulación de cargos en ese congreso en el marco de la ponencia Política y de Estatutos que ha coordinado el vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez-Maillo, y que por primera vez estará abierta a los 3.128 compromisarios que participarán en el cónclave.
Fuentes 'populares' reconocen que abrir el debate sobre las incompatibilidades pondría la lupa sobre situaciones que afectan a destacados cargos del partido, como la secretaria general, María Dolores de Cospedal, que es a su vez ministra de Defensa del Gobierno de España y presidenta del Partido Popular en Castilla-La Mancha.
En cuanto a la acumulación de cargos, el concejal del PP ha señalado que es un tema que hay que «clarificar» porque «el que mucho abarca poco aprieta». Así, ha dicho que es «importante que solo se tenga un cargo y no varios», si bien ha subrayado que él no va «contra nadie» sino que lo considera un principio de regeneración política y democrática.
En este sentido, ha anticipado que hará enmiendas para «avanzar en un modelo de separación de las funciones del Gobierno y las funciones del partido. «A lo mejor que la cabeza sea presidente del partido y del Gobierno no está mal, pero por debajo debe visualizarse mucho más y fortalecer el principio de separación de poderes», ha indicado.
De hecho, ha señalado que el PNV si aplica esa separación entre Gobierno y partido y el PP también debería «darle una vuelta», ya que en muchos casos puede prevenir problemas. Como ejemplo de ello ha puesto lo que ya les ocurrió con el 'caso Gürtel' argumentando que cuando a un alcalde se le da el «todo el poder» tanto el institucional como el del partido «la corrupción es más fácil que ocurra». «Esa reflexión tenemos que hacerla», ha abundado. DEFIENDE LIMITAR MANDATOS: «AZNAR LO HIZO»
Además, Henríquez de Luna considera que en los puestos de responsabilidad de Gobierno «es fundamental que haya limitación de mandatos» y ve «positivo» que pueda fijarse en dos legislaturas. De hecho, ha recordado que el expresidente José María Aznar «lo hizo» en su momento.
Sin embargo, la ponencia de Estatutos ha dejado intacto el capítulo relativo a las incompatibilidades y no ha entrado a regular la limitación de mandatos, pese a que el pacto de investidura que sellaron con Ciudadanos (C's) a finales de agosto fija un plazo de ocho años para el presidente del Gobierno. Sin embargo, el partido naranja ha dicho este martes que si Rajoy opta finalmente a un tercer mandato no estaría incumpliendo ese pacto.
Henríquez de Luna, que ya defendió sin éxito implantar las primarias tanto en el congreso que el PP celebró en Valencia en 2008 como el de Sevilla en 2012, considera un avance el sistema de doble vuelta para elegir al presidente del partido nacional, regional y provincial pero lo ve «insuficiente».
Por eso, ha señalado que va a «reformular» su enmienda para adaptarla a la propuesta que hace 'Génova' y defender que si para la primera vuelta vale el voto de todos los afiliados, en la segunda vuelta también puedan votar todos ellos y no solo los compromisarios. «En cualquier sistema de doble vuelta votan los mismos», ha enfatizado, para poner en valor la tesis de «un militante, un voto».
Henrínquez de Luna ha defendido la necesidad de que el PP se abra y permita «participar de forma directa a los militantes» y ha criticado que se intente crear una «ceremonia de la confusión» asegurando que eso es de un «partido asambleario». «Que voten los militantes no tiene nada que ver con un partido asambleario. El poder lo tienen que tener los militantes», ha proclamado.
De hecho, el también presidente del PP en el distrito de Salamanca ha indicado que si algo ha demostrado la elección de compromisarios para el congreso de febrero (2.565 son electos mientras que 513 son natos al ser parlamentarios y altos cargos del partido) es que «al final el congreso del PP será una congreso de cuadros y dirigentes del partido».