La factura de la luz ha subido un 11,6 % en marzo respecto al mismo mes de 2016 pero ha bajado un 2,5 % en relación a febrero para un consumidor medio acogido a la tarifa regulada o Precio Voluntario del Pequeño Consumidor (PVPC).
La factura eléctrica para un consumidor doméstico tipo -con una potencia contratada de 4,4 kilovatios y un consumo anual de 3.000 kilovatios hora (250 KWh al mes)- se ha situado en el mes que ahora termina en 55,76 euros, frente a los 57,2 euros de febrero y a los 49,95 euros de marzo de 2016.
Desde enero, mes en el que el precio de la electricidad alcanzó picos superiores a los 91 euros el megavatio hora (MWh) en el mercado mayorista, el descenso en el recibo de la luz ha sido del 17,4 %.
En enero -cuando la escasez de lluvia y viento limitó el uso de las centrales eléctricas y de los parques eólicos y obligó a utilizar tecnologías más caras-, la factura eléctrica para un consumidor tipo llegó a los 67,49 euros.