El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha propuesto suprimir una «sectaria» Ley de la Memoria Histórica y sustituirla por una ley de la concordia que «reivindique la transición constitucional».
«Propondremos en las Cortes una ley de concordia que reivindique la transición constitucional y que derogue la sectaria reescritura de la historia, que arroja paladas de rencor sobre la sociedad española», ha dicho, destacando como la palabra concordia es la que figura en el epitafio de la tumba de Adolfo Suárez.
Casado ha recordado la Transición como un momento en que «hubo grandeza moral, sentido de la historia, reconciliación y concordia» y se enterró «para siempre el conflicto civil».
«Ni hubo ocultación ni hubo sometimiento ni hubo miedo», ha asegurado.
La concordia es lo que «a algunos, muy pocos les faltó entonces y algunos más les sigue faltando ahora», ha lamentado, a la vez que ha asegura que la Ley de la Memoria Histórica es «tan irresponsable y también tan innecesaria», por eso «no vamos a consentir que se muerda el anzuelo de debatir sobre qué pasado hay que desenterrar».
Casado ha calificado la Comisión de la Verdad propuesta por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como una «mascarada orweliana de otros regímenes, otras épocas y otras latitudes», y la ha incluido en la «agenda excéntrica» similar a la Rodríguez Zapatero en 2004, cuando «gratuitamente» creaba «confrontación entre españoles, impulsada por el Gobierno».
«Otra vez hablando de la Guerra Civil», ha lamentado Casado, que considera que se trata de una «ridícula coartada, una y otra vez, de la izquierda radical para justificar su sectarismo y disimular su absoluta incompetencia», y «denostando la transición» cuando tres generaciones «derrotaron el enfrentamiento civil» y ellos quieren «seguir alimentándolo».
Por otra parte, Casado ha afirmado que «España no tiene un problema con su sistema político», pero sí «un problema con su izquierda», que va «a la deriva», porque fortalece «a quienes quieren romper España» echándose «en manos de los radicalismos y secesionismos».
También ha advertido que el presidente del Gobuerno, Pedro Sánchez, haya llegado a La Moncloa evitando las urnas.
«Es muy grave que el socialista haya aceptado que su camino hacia el Gobierno ya no pasa por las urnas, pero es consecuencia lógica de su peligroso juego de nostalgia republicana», ha manifestado.
Casado ha animado a su partido ante un año en que habrá elecciones municipales, autonómicas y europeas, a las que pueden sumarse andaluzas y catalanas -según ha dicho-, y generales: «Estamos preparados para llegar otra vez a las instituciones, cuanto antes», ha concluido.