Cerca de un centenar de franquistas se concentran ya en las inmediaciones del Cementario de Mingorrubio para honrar al dictador Francisco Franco en su 'segundo entierro', todos ellos fuertemente vigilados por el dispositivo policial organizado al efecto.
Ignacio Menéndez, un exlegionario ataviado con su traje verde, varios exmilitares y hasta un cura llegado exprofeso de Rumanía se han sumado a la concentración.
Ménendez ha sido de los primeros en llegar y desde primera hora ha intentado tomar posiciones para poder «rendir honores» a quien, ha explicado, es su «héroe». Lo mismo ha hecho Marius Visovam, un cura rumano que se ha desplazado hasta Madrid para agradecer a Franco su lucha contra el comunismo. Lo ha hecho, según ha explicado a Europa Press, como víctima de la presión comunista en su país.
«Franco es la espada más limpia del mundo», ha proclamado a gritos por su parte, Miguel María Martínez Villote, quien tiene enterrado en el Valle de los Caídos a un tío que «cayo en la toma de Bilbao».
VIVA FRANCO, ARRIBA ESPAÑA
Los concretrados, vigilados en todo momento por los agentes de Policía que controlan el acceso a las inmediaciones del cementerio donde va a ser trasladado el dictador, han coreado varios 'Vivas' a Franco, 'Arriba España' y han tachado de «traidor» a Pedro Sánchez y han promovido hasta un abucheo «a la prensa carroñera». «Han venido a reírse de nosotros», se quejaba uno de ellos.
La mayoría de banderas que portan los concentrados, casi todos con más de 50 años, son constitucionales, si bien se han visto también ya varias enseñas preconstitucionales e incluso falangistas, con el yugo y la flechas.
Una de las banderas con el lema 'Gracias Franco', la portaban miembros de la Asociación en defensa del valle de los Caídos. Los franquistas han gritado también 'Muerte a los traidores' y numerosos insultos contra el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez.