Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Guardia Civil, han intervenido casi 5.000 kilogramos de hachís dispuestos en un total de 126 fardos justo cuando estaban siendo descargados en el puerto alicantino de Santa Pola. Cuatro personas han sido detenidas por su presunta implicación en los hechos, de las cuales tres fueron arrestadas in fraganti y otra, que huyó, se entregó posteriormente en Castellón.
Según han informado en un comunicado conjunto, la investigación se inició gracias al intercambio constante de información en la lucha contra el narcotráfico, fruto del cual se tuvo conocimiento de la posible llegada a las costas alicantinas de una embarcación con gran cantidad de hachís procedente del continente africano.
La información recibida se confirmó cuando los agentes avistaron una embarcación tipo 'go fast', con cuatro motores navegando a una velocidad de 52 nudos y que se encontraba aparentemente cargada de fardos, lo que motivó el establecimiento de un dispositivo de vigilancia conjunto entre Policía Nacional y Guardia Civil en la zona del puerto deportivo de Santa Pola, para cubrir todos los accesos y detectar posibles movimientos de descarga de droga.
Mientras los agentes se encontraban en la zona, observaron una furgoneta con las puertas traseras abiertas y aculada a una embarcación de recreo, donde diversas personas presuntamente realizaban labores de descarga del barco y carga en la furgoneta.
Cuando los agentes se aproximaron, todos ellos supuestamente trataron de emprender la huida, momento en el que fueron detenidos tres de ellos. Uno de los arrestados reveló la existencia de una segunda furgoneta preparada para cargar el resto de la droga, por lo que los agentes procedieron a su incautación.
En la parte trasera de la furgoneta que empleaban para descargar la droga se localizó un total de 74 fardos de hachís de unos 38 kilogramos cada uno. En ese mismo vehículo los agentes hallaron también una bandolera con documentación de una cuarta persona que fue identificada como uno de los que emprendieron la huida.
Al día siguiente, esta cuarta persona se personó en la comandancia de la Guardia Civil de una localidad castellonense, donde quedó detenido por un delito contra la salud pública.
El operativo policial ha sido desarrollado por agentes del grupo de estupefacientes (UDYCO) de la Brigada de Policía Judicial de la Comisaría Provincial de Alicante, GRECO Levante de la Comisaría General de Policía Judicial, grupo 18 de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Madrid, Policía Judicial de distrito Centro de Madrid, Policía Judicial de la Comisaría de Alcantarilla (Murcia) y por el equipo de delincuencia organizada y antidroga (EDOA) de la Comandancia de Guardia Civil de Alicante.
Embarcación de lujo
El barco del que se estaban descargando los fardos de hachís se trata de una embarcación recreativa tipo yate, de bandera británica, que permaneció custodiada hasta la correspondiente autorización de entrada y registro.
Los agentes procedieron a intervenir en su interior un total de 52 fardos (dos en la cubierta, tres en la parte inferior y 47 en las habitaciones), cuatro teléfonos móviles de alta gama, un teléfono satelital, dos juegos de llaves y documentación variada.