Renfe ha pedido a Sureste, la empresa responsable del personal de seguridad en la estación de plaza de Catalunya de Barcelona, abrir un expediente informativo y apartar «inmediatamente» del servicio a los cuatro vigilantes que en la tarde de este miércoles redujeron a un joven negro que se había colado, según informa Efe.
Algunas personas que había en ese momento en la estación grabaron con sus teléfonos móviles la escena y esos vídeos se han hecho virales en las redes sociales.
En estas imágenes no se vé como comienza el incidente, sino que comienzan con varios vigilantes rodeando al joven que, en una actitud amenazante, invita a los hombres a acercarse.
A continuación, los vigilantes le tiran al suelo e intentan reducirle y esposarle, mientras algunas personas rodean a su vez a los cuatro hombres llegando incluso a tocarles, hasta que llegan unos guardias urbanos de paisano que se hacen cargo de la situación.
Renfe ha señalado que la empresa de seguridad es la responsable de abrir el expediente y subraya que no tolera «ninguna actitud, ni verbal ni física, que pueda atentar contra la integridad de los viajeros, independientemente del hecho anterior que se haya producido».
El sindicato Alternativa Sindical de Trabajadores de Seguridad Privada, ASTSP, por su parte, ha hecho público un comunicado este jueves en el que denuncia «el linchamiento que desde la tarde de ayer miércoles 20 de septiembre» sufren estos trabajadores «por el simple hecho de cumplir con su trabajo: velar por la seguridad de los usuarios ante el intento de un hombre de violentar el espacio público».
Según el informe interno elaborado por los trabajadores de Sureste Seguridad, empresa subcontratada por Renfe para la vigilancia de esta estación, añade la nota, «todo comenzó sobre las 18,32 horas, cuando los vigilantes observaron que había un hombre colgado de la baranda de las escaleras con el fin de acceder a los andenes sin pasar por el control de las máquinas validadoras de billetes».
Cuando el joven se coló, los empleados de la compañía de seguridad querían identificarle y hacerle salir de la estación, pero «comenzó en ese instante a increpar a los vigilantes y a retarlos a pelear».
Asegura el sindicato que los trabajadores de seguridad intentaron apaciguarle mientras esperaban la presencia de la Guardia Urbana a la que habían alertado, pero el joven adoptó una actitud agresiva e incluso algunos usuarios les increparon e insultaron.
El portavoz nacional de Alternativa Sindical, Alberto Garcia, ha denunciado «la manipulación que de lo ocurrido están haciendo algunos partidos y medios de comunicación» y ha anunciado que se personarán para defender la labor y la dignidad de los vigilantes ante estos ataques.