Muchas veces, trabajar de cara al público tiene graves inconvenientes, sobre todo cuando se producen situaciones tensas. Es lo que ocurrió en un autobús en Estados Unidos, donde se desencadenó una pelea que se ha hecho viral.
En las imágenes se ve cómo el conductor, con chaleco reflectante y mascarilla, discute con un pasajero, al que le insta a que se ponga detrás de la línea amarilla.
Tras varias amenazas de expulsarle del autobús, y ante la insistente actitud desafiante del viajero, el conductor conecta una serie de golpes que acaban con su rival en el suelo y sangrando por una ceja.
El pasajero logra levantarse, pero claramente su actitud desafiante baja varios grados.
En una imagen posterior, se ve cómo el conductor coge un teléfono para hacer una llamada, presumiblemente a la Policía.
El comportamiento del señor de rojo es inadmisible. No obstante, habría que saber cómo se llego a esta situación tan desagradable. Por último, una reflexión, si el conductor hubiera sido blanco y el agredido negro, ¿estaríamos hablando de legitima defensa o violencia racista?