Guillermo Bárcenas, más conocido como Willy del grupo Taburete, siempre ha estado bajo la sombra de su apellido. Ahora, se ha sincerado sobre varios aspectos de su vida privada en una entrevista con Jesús Vázquez.
El joven artista tuvo en cuenta todos los problemas a los que se iba a enfrentar dentro de la industria musical por ser hijo de Luis Barcenas. Por ello, tras la entrada de su padre en prisión, se trasladó a Chile para comenzar una nueva vida «donde nadie lo conociera».
Tras ese gigante paso, las cosas no fueron a mejor y tomó la que ha dicho que «fue la mejor decisión de su vida»: volver a España. Poco después conoció a sus compañeros de banda y «les enseñó las canciones que había compuesto».
«Cuando nace Taburete mi padre está en la cárcel, todas las cuentas están paradas. La amiga de la madre de uno de los del grupo nos hace un préstamo de 2.000 euros», ha explicado en la charla para Mtmad.
Asimismo, Bárcenas ha contado cómo se ha enfrentado a tantos años de juicios y a la prisión: «Es algo muy duro con lo que me he acostumbrado a vivir. La cárcel forma parte de mi vida. Son años yendo a ver a mi padre y, ahora, a mi madre».
«Trabajo de lo que me gusta, tengo mis amigos de siempre, mi novia que es maravillosa... Tengo tantas cosas muy buenas que no van a poder con lo otro», ha detallado con tono optimista.
Finalmente, el intérprete de 5 sentidos ha desvelado que jamás se replanteó ser cantante: «Mi pasión era el cine, siempre quise ser director de cine. Estudié Administración de empresas por la presión de la familia, luego me fui a estudiar cine... y cuando volví no me salía casi nada de trabajo. Luego, mi primo, que tenía una banda, me dijo que necesitaba un cantante».